Percy: ¿Qué lees?
Annabeth: La biblia.
Piper: ¿Qué? ¿Por qué?
Annabeth: No sé, la encontré por ahí. Es interesante ver lo que otra religión cree.
Hazel: ¿Y qué dice?
Annabeth: Al parecer ser gay es pecado.
Piper: Ni modos, Percy.
Percy: Porque tu muy hetero.
Jason: Pero, ¿qué no había diez apóstoles?
Annabeth: Sí, ¿y eso que?
Jason: Bueno, dicen que una de cada diez personas es gay, así que uno de ellos tuvo que serlo. Entonces, ¿por qué permitiría eso?
Leo: Yo digo que fue Simón, porque es el nombre más gay.
Frank: ¿Qué más dice?
Annabeth: Habla de más pecados. Dice que comer langosta también es una abominación.
Percy: ¡Ja! Porque lo es.
Annabeth: Aunque algo raro es que ni su Dios, ni Jesús hablan en contra de las personas gays.
Piper: Tal vez quiso decir algo pero no quería herir los sentimientos de Simón.
Leo: Igual y a Jesús le gustaba Simón.
Hazel: O, solo fue el hombre mostrando su propia intolerancia.
Percy: Nah, nos gusta más la teoría de un romance gay entre ellos.
Annabeth: Chicos, respeten-
Jason: Más bien, yo digo que Júdas era el gay.
Annabeth: ¿Tú también?
Jason: Annabeth, he tenido está teoría en mi pecho toda mi vida, dejame sacarla.
Nico: ¿Qué están haciendo, perdedores?
Percy: Hablando sobre la biblia.
Annabeth: [muestra el libro]
Nico: ¡AHHH! [salta y sale corriendo]
Will: ¡¿Qué le hicieron?!
Leo: Solo le mostr-
Will: ¡¿La biblia?! ¡¿Qué acaso quieren que llore?!
Percy: Wow, Nico es tan Júdas.
