Ƥгόƪσɠσ

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Las llamas iluminaban la noche y hacían destellar la mirada de los presentes de una forma casi diabólica. El continuo chisporroteo se mezclaba con el viento y los excitados murmullos de la gente, convirtiéndose en una espeluznante canción.

Un niño entre los espectadores apretó la mano de su madre. Algo subió por su garganta, no supo si fue un grito o solo náuseas, pues cerró la boca con fuerza y apretó los dientes para no dejarlo salir. Todo lo que deseaba era huir de ahí, alejarse de la espantosa exhibición, pero el terror lo paralizaba. Quiso cerrar los ojos, pero no pudo hacerlo, así que continuó mirando la pila de cuerpos a los que su propio padre había prendido fuego en medio de las exclamaciones de victoria de la multitud. 

No sabía cuántas eran, pero parecían demasiadas; niñas y mujeres, de cualquier edad, con los rostros deformados en gestos de horror y temor, que fue lo último que debieron sentir antes de que sus verdugos las empujaran al cobijo de la muerte. Las habían llamado brujas, dijeron que eran malas, servidoras de Satanás, que su sola presencia contaminaba el mundo y que sus rituales oscurecían la vida.

El niño llamado Jongdae presionó con más fuerza la mano de su madre cuando sus ojos se fijaron en la mirada perdida de una niña que posiblemente tendría su edad. ¿Era posible que alguien tan joven también fuese malvada? Probablemente no. De hecho, ninguna de ellas lucía realmente mala, todas parecían mujeres normales, como su madre o como sus hermanas.

Pero ¿qué sabía él? Tan solo era un niño de diez años que jamás tuvo la oportunidad de comprobar con sus propios ojos lo que ellas eran capaces de hacer.



Gracias por leer!

Esta historia también pertenece al Creepy Love Fest organizado por  @LuuMotherfuckers, si gustan de historias de terror deberían darse una vuelta por ahí, les va a encantar. 

WITCHES [Chenmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora