Que aburrido, solo escucho a los perros de los vecinos…. asi pensaba Mery, esperando que regresara la luz, desde anoche se habia ido y solo escuchaba al viento y los perros.
Estaba completamente sola despues de sus padres habian salido a realizar algunos mandados necesarios y estaba con sus tres perros dobermans…., Doffy el mas viejo y sus dos hijos, Zartan y Malena, mas jovenes y fuertes, los cuales estaban acostados al portal de la casa atentos a cualquier ruido que escuchaban en especial de los perros vecinos.
Ante todo este varullo habia podido mantenerse en linea gracias a que las lineas de internet aun estaban activas y su laptop tenia carga para seis horas mas asi que podría aprovechar para saber que sucedia en todo el país, la luz llevaba 8 horas sin volver y estaba muy aburrida, ya que su hermano laboraba y aun no llegaba y ya se habia leido 4 capitulos de su novela favorita… Euroclidon.
- Al parecer esto va para largo- se decía a si misma. Tendre que apagar la laptop, no quiero perder carga sino hay solucion a esto, asi dicho esto, la cerró.Tomó el grueso libro y en el podía verse en letras doradas y poderosas su título…. EUROCLIDON.
Buenos Atrius, dijo, vamos a ver como escapas de ese pozo abandonado, dicho esto lo abrió en donde lo había marcado y empezó a leer en el portal, en la vieja mecedora de su abuela. Mery era una chica que rozaba los 20´s, blanca, cachetes redondo pero de hermosa apariencia, mirada muy sería y un largo cabello rizado azabache, tamaño mediano, tal vez 1.60 metros, delgada y con caderas anchas, solo por ahora esop podemos saber y claro una nariz no perfilada un tanto redonda, como las que muchas chicas de su edad, quisieran operarse para poder tenerla mas perfilada.
Cuando estaba más concentrada en su novela de aventuras, los dobermans empezaron a ladrar, muy fuerte, como sabiendo que alguien se acercaba, inmediatamente interrumpio su lectura para observar de lejos a un hombre de edad madura, que se acercaba a pie hasta la casa, cargando un maletin en su mano izquierda, pantalones jeans de buena marca, zapatos deportivos chocolates, y una camisa sin abrochar, ya que por dentro se vea un sueter que llevaba el simbolo de una mano agarrando un trueno, entre mas se acercaba se podia ver su rostro, algo normal, un poco regordete, no era flaco, pero tampoco era gordo, se veia que intentaba mantenerlo en forma, ya que sus brazos se veian hinchados por el ejercicio continuo, llevaba paso firme, pero agotado por la caminata, que solo el sabría cuanto habría recorrido, cuando vio que los dobermans se acercaban amenzantes, se detuvo a 10 metros de la casa de Mery.
-Buenos días- gritó- estoy cerca del pueblo de Dos Riós?, preguntó.
-Ella le respondió, Si señor aun sin pararse de la mecedora, Doffy, Zartan y Malena vengan aca- gritó con autoridad.
Los caninos obedecieron a regañadientes, pero miraban de reojo al extraño, sin confiar completamente en el mismo, solamente el viejo Doffy se acercó mas tranquilo, como si conociera al extraño y lo olió los pies y movió la cola.
-Hola, dijo el extraño-
Mery camino hacia el con los perros a cada lado de ella y se extraño de lo que veía.
- Usted ha venido por aqui antes, Doffy solo le mueve la cola a los que conoce.
-Bueno tal vez, pero a este perro nunca lo habia visto que yo recuerde.
Ya ha venido a Dos Ríos antes?-preguntó Mery
-Si pero hace mucho tiempo, pero tanto que ya no recuerdo, he viajado mucho y a muchos lugares.
- Y que hace por aca otra vez, disculpando mi curiosidad? volvio a preguntar.
-Estoy buscando a un amigo que tuve aqui a ver como le iba y a cumplir una promesa- Gran libro el que tienes ahi.
-Lo conoces? dijo Mery.
- Si a toda la saga, pero ese es el que más me atrapo de los tres.
-Lo has leido todos?, no puede ser, los dos siguientes los estoy buscando y no los veo en toda la internet y lo he probado todo, y cuando los encuentro son muy caros y dificiles de traer aqui, tendría que moverme a la capital para pedirlos y eso ahora es muy dificil…..
- Bueno, El Gran Muro es algo portentoso, lo leerias en un solo día y la Tierra de los Vivientes te atrapa inmediatamente, por que al que tiene curiosidad, quiere terminar de leerlo, grandes libros, ese Lazlo Vladic es tremendo escritor, una lastima que no se sepa de el en muchos años…. Disculpa que cambie el tema, sabes por que se ha ido la luz, anoche venia en un automovil alquilado y se me poncho una llanta y me costo trabajo llegar aqui, no soy bueno cambiando las mismas y jamás pense que caminaría toda la noche, no tienes idea los cansado que estoy y necesito ayuda para traerlo…
- No se preocupe, si tiene movil, puedo llamar al mecanico del pueblo, el tiene un Pick-up y ayudarlo en su necesidad, si quiere llamo a su amigo a ver si tambien puedo localizarlo..
-Bueno, si creo que podemos hacer eso, es lo de menos, mi amigo se llama Lorenzo… Lorenzo de Lima, lo conoces…..mmmmm disculpa, hemos hablado mucho, pero no me he presentado, mi nombre es Darius Marenz, no te asustes, no soy de este país pero hablo muy bien su idioma señorita.
-Disculpe es verdad, me llamo Mery, bueno es María, pero nadie me dice así por aqui, Me llamo María Velasquez, aunque me hubiera gustado que me hubieran llamado Malena, je.
- Como el amor de Lord Atrius ehhh, muy bien me encanta tu gusto. Ten mi celular, no es muy sofisticado, ya que lo compre solo para llamar, muchas de mis cosas las deje en el Hotel de la capital, llama a quien necesite.
- Ok si sera un honor, pero el nombre de su amigo, no me suena, puede que sea de alguien que ya no vive aqui, pero mucha gente puede que si lo conozca, venga sientese en el portal, ya los perros no le temen por que habla conmigo.
Dicho esto nuestros personajes caminan al portal de la casa, mientras Mery hace las llamadas necesarias para ayudar el visitante de Dos Ríos.
