Maybe Tomorrow? - Taegyu

Chapter 2.

— ¿Ya me dirás que sucede o también va a echarme de tu habitación? — me miró con preocupación, Yeonjun.

Llevábamos alrededor de cinco minutos sentados sin decir nada y solo mirando el suelo.

— No quiero hablar de eso, hyung. — susurré esperando no comenzara a presionarme como Taehyun lo había hecho.

— Bien, si no quieres hablar no te presionaré pero ¿sabes que Tae lo hizo porque está realmente preocupado por ti?

Giré mi rostro para verlo mejor y este me sonrió. Yo solo me encogí de hombros.

— Quiero pensar que fue por eso y no por querer demostrar una vez más que solo estaba siendo dramático.

— Hey, sé que aveces es un tanto gruñón como un abuelo. — río bajo sacándome una sonrisa. — pero sé cuanto amor hay en ese pequeño por ti.

— También lo sé, Yeonjun. — este me miró esperando que prosiguiera. — pero a veces su lado racional ocasiona este tipo de disputas. Hoy fue simplemente demasiado para mi.

— Todos sabemos que es demasiado difícil de tratar y que suele ser bastante cerrado en cuanto a todo.

— No puedo simplemente con la típica frase cliché "así me conociste, así soy y no hay nada que puedas hacer" que siempre usa cuando recalco su falta de empatía hacia los demás.

— En eso estoy de acuerdo contigo. No debería de justificar su poca empatía hacia los demás con el típico "así soy".

Suspire rendido, me dolía la cabeza y el cuerpo por sobre exigirme de más en la empresa pero eso me ayudaría a poder dormir aún después de haber discutido con Taehyun.

— Hyung, necesito dormir pero gracias por la plática. — medio sonreí.

— No fue nada, solo quiero que todos estén bien. — sonrió achinando los ojos y me despeino el cabello para después ponerse de pie.

— ¿Y tú estás bien? — lance la pregunta esperando fuera sincero pues desde que había roto con Soobin se la pasaba diciendo que "estaba bien" pero nadie le creía, ni siquiera el mismo Soobin.

— Lo estaré, Gyu. — una débil sonrisa se posó en su rostro y salió cerrando la puerta tras de él.

Pase parte de la noche llorando y la otra durmiendo pero era muy notorio que esas pocas horas no habían ayudado a no despertar como cría de panda.
Las ojeras estaba tan marcadas que estaba seguro Lía noona me regañaría apenas me viera.

Salí con un gorro que aplastaba mi cabello tapándome así el rostro, ni siquiera avise que me iría por mi cuenta, simplemente salí disparado a la empresa antes de que cualquier cosa pasara o me tuviera que cruzar con Taehyun tan temprano y no pudiera recibir esos buenos días melosos acompañados de un pequeño beso en los labios.

— ¡Por Dios! ¿de nuevo dormiste tarde jugando esos videojuegos? — y ahí estaba Lía noona con el ceño fruncido y tratando de tapar mis ojeras lo mejor que podía.

— Lo siento, Noona. — susurré y aparte la vista del gran espejo frente a mi.

— Beomie ¿me quieres contar qué pasó? Aún es temprano y ambos necesitamos de un café. — me sonrió cepillando mi cabello. Con una media sonrisa asentí y me levante para seguirla hasta la cafetería.

Caminábamos tranquilamente hablando de cosas tribales hasta que la silueta de Taehyun nos detuvo.

— Buenos días, Taehyunnie. — lo recibió Lía noona con una gran sonrisa. Este apenas pudo devolvérsela.