Oh, is this love?

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Era inútil, el trabajo de su vida era un fracasó; todo su esfuerzo, empeñó y determinación quedaron en la basura. Sentía cómo si le hubieran tirado un balde de agua fría en el mejor momento de toda su vida, era la misma sensación de ver la nota del examen final de una de las materias más importantes que estudiaste por semanas (e incluso dejando de comer) y al ver el resultado tienes una mala nota, siendo reprobado por unos puntos.

Invirtió todos los ahorros de su vida para crear, lo que se suponía, "el proyecto de su vida" que "supuestamente" lo sacaría de la pobreza al ser vendido a gente de máximo poder, siendo reconocido y admirado por mentes futuras. Ahora su mundo se le cayó encima, ¿cómo iba a pagar todas sus deudas que le debía al banco, sin contar los gastos que requería su existencia? Simple, volverse el ladrón de la esquina que siempre lleva consigo un arma de juguete o esperar la muerte más lenta e inhumana causada por desnutrición y deshidratación al sufrir máxima pobreza en México.

En un abrir y cerrar de ojos perdió todo, su dinero, tiempo y dignidad, desperdició miles de horas de su miserable vida al invertirlo en un error.

Él creía que luego de recibir tantas burlas y humillaciones, por fin podría decirles en sus caras <<¡te lo dije!>>, juraba que ya podía saborear la victoria que estaba en la punta de su lengua. Suponía que todo su esfuerzo había valido la pena, consideró que todo había valido la pena, pero solo era una fantasía más, una muy estúpida.

Y ahí estaba Alex, recostado en su escritorio que estaba repleto de papeles, sus mejillas estaban rojas de ira, vergüenza y humillación, con su mirada llena de lágrimas que descendían por sus mejillas hasta llegar a su mentón. Sentía asco, asco por lo que era y lo que pudo ser, sentía impotencia, sentía emociones indescriptibles pero dolorosas.

Miro de vuelta al causante de todos sus problemas, pero notó algo diferente.

Espera, ¿él había abierto los ojos?