Cap5.

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⚠Alerta de contenido lemon

Genya se encontraba debajo de Sanemi mientras que este lo besaba intensamente, al menor se le fue arrebatado su camisa y él mayor besaba y dejaba ligeros chupetones por él cuello y él cuerpo de Genya mientras que este se tapaba la boca para no soltar gemidos.

- No hagas eso, quiero oír tu bella voz.

Dijo con voz ronca, Genya sintió un bulto en sus pantalones, Sanemi sonrió y le bajó aquello que cubría al menor, vio el miembro erecto de Genya y lo empezó a lamer mientras metía dos dedos dentro del menor, Genya no podía evitar gemir, era una sensación que jamás había experimentado, sentía que hiba a morir, pero se sentía bastante bien que sus gemidos lo exponían.
Sanemi sintió que ya había preparado mucho al menor, y de golpe metió su gran pene dentro de Genya haciendo que este soltara un gemido fuerte.
No pasó mucho y ya se escuchaba él miembro de Sanemi chocar con él interior de Genya, el bosque ers tan silencioso que solo se escuchaban las embestidas y los gemidos de Genya.

Genya ya se había corrido, pensó que ya sería él fin de esa etapa pero no fue lo que él creía.

- ¿Tan rápido te corriste? Falto yo chiquito.

Dijo Sanemi antes de poner a Genya en cuatro y penetrar su interior fuertemente haciéndolo gemir de dolor y placer. Nuevamente se escuchaban los gemidos del menor junto a los golpesitos, ya estaba exhausto, Sanemi por él contrario parecía una vestía salvaje en celo, no dejaba de cojerlo una y otra vez en distintas posiciones, no sabían cuanto había pasado, era de noche y se seguían escuchando los gemidos de Genya, si es que habían un par de demonios cerca, seguro no quisieran acercarse a aquellos ruidos tan escandalosos y eróticos que emitían ambos Shinazugawa. Genya suplicaba por piedad pero Sanemi no lo escuchaba hasta que... Algo salió de Sanemi, era viscoso y blanco, parecía que en fin había llegado.

- ¿Que tal?...

Decía entre jadeos él pilar. Genya lo volteo a ver molesto y le levantó él dedo.

- Tu mañana me vas a cargar todo él puto camino!

- ¡Lenguaje!

- A la mierda él lenguaje! ¡No siento las piernas!

Sanemi empezó a reir por la respuesta del menor, Genya lo acompañó en las risas y se quedaron bajo ese árbol toda la noche.

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¡Lamento que el capítulo sea tan corto! Espero que les haya gustado! No olviden votar para saber que les gustó! Bye mis amores💕

Unɑ misión un tɑnto 𝙞𝙣𝙘𝙤𝙢𝙤𝙙𝙖//SaneGenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora