Capítulo II: Libertad

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Shtihir el hijo de Guzda sobrevivió el ataque al la nave crusero, todos los sobrevivientes fueron llevados a una prisión de máxima seguridad en el planeta Brivel. Esta prisión era conocida porque sometían a los prisioneros a torturas, muchos cometieron suicidio en ella, otros cumplían con su condena y salían locos de ahí, los demás solo querían escapar cueste lo que cueste. Shtihir solo tenía 5 años, lo encerraron ahí y se olvidaron de él... pero Roar sobrevivió las heridas en la cara y resulta que Roar le debe servicios al gobierno comunista de ese planeta así que contrató a un jedi maestro caza recompensas y le pagó para que entrenara a Shtihir con el lado oscuro de la fuerza, el jedi se llamaba Master Jiwok. Roar era un general en ese planeta, comandaba los ejércitos de Brivel en la guerra civil, se podía ir si quería pero decidió quedarse hasta que Shtihir terminara su entrenamiento y usarlo como su aprendiz. Mientras tanto Guzda fue al templo jedi desesperado a pedir refuerzos para ir al planeta Brivel a rescatar a su hijo, pero un jedi llamado Dylan Dosnow con una sicatriz en la cara de la frente a los labios secretamente sobornó a algunos miembros del consejo jedi para convencerlos de que es muy difícil que Shtihir haya sobrevivido en ese planeta, le negaron el rescate y lo amenazaron de expulsarlo del templo si se atrevía a ir a rescatar a su hijo, Guzda no tuvo opción, no pudo hacer nada.
En la prisión Shtihir conoció a Master Jiwok que sería su nuevo maestro, Jiwok le tuvo cariño y lo trató como si hijo aunque no lo pudiera proteger de las torturas físicas y psicológicas que los guardias le hacían a los prisioneros constantemente. Jiwok al entrenar a Shtihir con el lado oscuro como le fue asignado le tenía que cambiar el nombre así que Roar le dijo que el nuevo nombre de Shtihir sería... Lord Dridus. Pasaron 15 años en la prisión, 15 años de duro entrenamiento y torturas inimaginables. Dridus ya tenía 20 años, Jiwok le tuvo tanto cariño a Dridus que no quería entregarlo a Roar. Jiwok se propuso a ayudar a Dridus a escapar para no dejarlo con Roar y un día ya era el momento, usaron la fuerza contra los guerdias de la prisión, abrieron paso hasta la armería donde estaba el sable de luz violeta de Guzda que Dridus tomó y el sable de luz amarillo de Jiwok. Jiwok huyó a un hangar a buscar una nave para escapar con Dridus mientras Dridus peleaba contra un ejército del planeta Brivel. En el hangar Jiwok se encontró con Roar...
Roar - "Me traicionaste! Ibas a obtener tu paga!"
Jiwok - "Dridus merece algo mejor, unirse al consejo jedi, convertirse en un caballero jedi y pelear contra el mal, Contra ti!"
Roar - "Dridus me pertenece! Mejor entrelégamelo ahora o haré su vida miserable, lo corrompere!"
Jiwok - "el no se unirá a ti nunca, si lo quieres ven y reclámalo. El debe conocer a su padre"
Roar - "Su padre? Incidus? -ríe- que haga lo que le plazca, quiera o no el es y seguirá siendo un Hijo de Roar!"
Empezaron una furiosa pelea que después de un rato terminaron en la azotea de la prisión, Dridus los vió y después de terminar de matar a todos los soldados subió a ayudar a Jiwok. Justo cuando estaba llegando Jiwok lo vió, se distrajo por un segundo y Roar lo atravesó co su sable de luz rojo en al abdomen de Jiwok. Dridus logró apartar a Roar por un momento, Jiwok en su lecho de muerte le dijo "tienes mucho poder Dridus, usalo bien y busca a tu padre" Roar golpeó a Dridus y éste soltó su sable de luz, tomó el sable amarillo de Jiwok y peleó un rato contra el. Roar y Dridus estaban muy parejos hasta que apareció una nave y Dridus rápido recogió su sable violeta y se llevó el amarillo , robó la nave y escapó del planeta. Por primera vez en 15 años Dridus sintió libertad.

Star Wars: Rise of DridusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora