PRÓLOGO

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3 de enero 1984

Londres, Inglaterra

Corvus observó la mansión desde afuera; el frío era infernal, su capa en su cuerpo y su capucha en la cabeza, lo tenían bastante abrigado; sus botas se hundían en la fría nieve que había caído, pero aún así, no se movió del lugar.

Divisó como los Cassfrey salían de la casa, dos grandes y tres jovenes, su vela dominante gruñó por lo bajo con molestia, necesitaba que se fuesen ya; sus pensamientos fueron escuchados, en un abrir y cerrar de ojos, la 'familia' de 'cinco', había desaparecido.

Lord Lestrange, suspiró con cansancio e ingresó a la mansión con una simple aparición, sabía que ellos no tenían elfos, y sus guardas las había destruido esa misma mañana; caminó en la oscuridad de la mansión recorriendola de arriba a abajo, pero no encontró a quien estaba buscando, maldijo en voz baja y siguió buscando en silencio, lo único que se escuchaba en esa mansión eran sus botas; con un suspiro bajó las escaleras que iban hacia las mazmorras y seguramente, hacia las celdas que tienen todas las mansiones, la suya incluida; caminó despacio y lento hasta que unos sollozos lo sacaron de sus pensamientos. 

Apuró el paso en las escaleras hasta que se chocó con las celdas una al lado de la otra, el llanto se seguía escuchando cada vez más fuerte, pero el culpable no se veía por ningún lado, caminó más rápido y con su criatura más que desesperada; el final de las mazmorras estaba cerca y todas las celdas estaban vacías, cuando divisó la última celda lo pudo ver.

Estaba en posición fetal contra el rincón, su cabeza estaba enterrada entre las rodillas, y decía en voz baja lo que Corvus pudo distinguir como 'No por favor' y 'Ayuda'; maldijo mentalmente y con un movimiento complejo de varita abrió la celda, provocando que el pequeño saltara en su lugar del terror que sentía, Corvus noto que estaba todo lastimado y mas que desnutrido; chasequeo la lengua con molestia y ganas de asesinar a alguien; caminó hacia el niño para cargarlo, pudo notar cuando él se tensó en sus brazos, pero eso no le importó, lo acomodó en sus brazos y lo apreto contra su cuerpo.

-Tranquilo pequeño, tranquilo soy yo, Corvus- Le susurró en el oído mientras lo tapaba con su capa para que no sintiese más frío del que ya tenía, el pequeño levantó la cabeza de entre las ropas del mayor y lo miró con sus ojos marrones claros, que en ese momento estaban tristes y apagados.

-¡¿Corv?!- dijo el pequeño sorprendido -Viniste, viniste por mí- Le dijo suavemente mientras se acurrucaba contra el cuerpo del mayor, Corvus sonrió apenas y besó el cabello todo sucio y enredado del joven, no le importó el estado de este, su pequeño era hermoso en cualquier estado.

-Claro que vine por tí mi amor, siempre estaré aquí para protegerte, esto se acabó, ya no tendrás que volver a esta mugrosa casa, vivirás conmigo de ahora en adelante, todo estará bien, te lo prometo- Le respondió Corvus mientras se prometía mentalmente que los Cassfrey pagarían por lo que le habían hecho a su pequeño, no le importaba si tenía que revivir al señor oscuro para que lo ayudase, lo haría, y no dudaría ni un segundo en destruir medio mundo mágico con tal de que los culpables pagasen. Con otro movimiento de varita y un hechizo oscuro, limpió todo rastro suyo de magia; luego se apareció en su mansión con su pequeño en brazos y dándose cuenta tardíamente, que su pequeño estaba pasando por una herencia de criatura; pues acababa de cumplir los 15 años.










Buenos dias!!!! espero que todos se encuentren bien, se que seguro estan igual que yo, con mil examenes y mil cosas; pero para aflojar y relajarse, les traigo un nuevo fanfic de Harry potter; espero que les guste y le den muhco amor. 

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