Después de tres años de aislarse a sí mismo, Huening Kai decide buscar a su antiguo grupo de amigos para enmendar sus errores por última vez.
TYUNNING | YEONGYUBIN
Mención y/o aparición secundaria de Heekai, Lewon (shipp random de Twenty), Mohee (s...
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Huening Kai no sabía si lo que caía de su rostro eran lágrimas o sólo el agua que había aventado a su rostro por sexta vez; mas prefería pensar que era la segunda, solamente para ignorar la posibilidad de él siendo vulnerable por algo tan tonto.
Especialmente algo que él mismo se buscó.
—¿Cáncer de mama masculino? ¿Es una broma?—Kai tenía el nervio suficiente para mostrarse escéptico e incrédulo, Lea no tanto.
Quizás porque ella siempre se tomaba las cosas demasiado en serio.
—¿Eso es posible, doctor? —preguntó su hermana, luciendo aterrada por adelantado.
El hombre suspiró un tanto irritado; era un día largo y su paciente lo estaba mirando de arriba a abajo con los brazos cruzados como si él fuera una especie de estafador. Aquel muchacho no sabía que de por sí solo dar la noticia era mucha presión sobre sus hombros, sin mencionar devastador.
—Es raro, señorita Choi, pero posible. —Kai no podía creerlo; debía ser algún tipo de broma. Si bien existían un par de pacientes con cáncer de mama en su árbol genealógico, todas eran mujeres. Él siempre pensó que serían Bahiyyih o Lea quienes tendrían que preocuparse de eso, no él—. Se presenta en su historial genético, por lo que usted siempre fue propenso a contraerlo. Estadísticamente, de cada cien casos de cáncer de mama, uno de ellos es de cáncer de mama masculino.
Qué momento más conveniente para ser especial, pensó Kai en lo que observaba el pozo de agua teñida de marrón perderse por el desagüe.
¿Qué importaba si teñirse el cabello él mismo sin conocimientos previos era malo para su condición? Iba a morir. Le habían hecho los exámenes correspondientes y no había nada prometedor para su futuro; presentaba dos factores de riesgo, estaba demasiado avanzado y existía una alta probabilidad de que estuviera diseminándose por todo su cuerpo.
¿A quién le importaban sus hebras? De todos modos se estaban cayendo.
Si el universo quisiera que viviera-... Si Kai hubiese querido vivir, habría ido a revisarse tan pronto como encontró una anomalía en su pecho.
Pero no lo hizo, porque ganas y dinero eran lo que menos tenía.
Por lo tanto, estar muriendo era su culpa.
—... Comunícate con la universidad y diles que vas a tener que dejar en pausa tu tesis. —la mirada del posteriormente rubio se había perdido entre los edificios y nubes que veía a través de la ventana. No le había estado prestando atención a Lea hasta que oyó su orden—. Tenemos seis meses para operarte e iniciar el tratamiento, Hyuka. Debemos tomarlo en serio.
El menor se tomó unos segundos para contestar, sabiendo que las palabras que saldrían de su boca no harían feliz a su hermana mayor.
