Fuimos

Anhelo

Hay momentos en la vida en las que te pones a reflexionar sobre tus errores.
Momentos en los que imaginas situaciones que jamás ocurrirán.
Momentos en los que te arrepientes de tus elecciones.
Y momentos en los que esperas que todo mejore.

Y aquí me encuentro en uno de esos momentos.

Los años después de tu partida se fueron amontonando.

Día tras día anhelaba volver el tiempo atrás y darte el amor que me había negado a ofrecerte.

Cuando lo elegiste como tu pareja fue el día en que finalmente morí.
Si bien mi cuerpo seguía vivo y respirando, mi alma y corazón estaban muertos.

El alfa orgulloso que habitaba en mi desapareció justo en el momento en que aquel hombre te marcó.

Mi calvario apenas comenzaba.

Después de que te expresaste de él como tu alfa, sentí como toda la esperanza que aún habitaba en mí moría.

Pero no hay mayor culpable de esto que yo

Cuando regresé a mi reino me encerré.
Quería estar solo.
Quería morir.

Rápidamente rompí todo compromiso que había hecho.
Quise que me destituyeran de mi posición.

Solo quería desaparecer

Pero la vida es cruel.
Y más para quienes se enfrentan al destino.

En todos lados se escuchaba a la gente hablar sobre mi.

Sobre cómo mi arrepentimiento finalmente llegó.
Sobre que por fin entre en razón.

Pero todos lo sabíamos.
Ya era tarde...

Mis padres lo repetían a diario.
Lo mal que me veía.
Lo triste que estaba.

Y siempre se escuchaba en medio de las comidas
"te lo dijimos".

Y solo podía decir que lo sabía.

Les expliqué el porqué hice todo lo que hice.

Que en mi corazón siempre habías estado tú.
Pero que mi necedad me hizo alejarte.

La vida es cruel,
Y más para quienes quieren ir en contra de ella...

Me convertí en alguien solitario.
Un asesino despiadado.

Solo estar en medio de las batallas me dejaba la mente en blanco.

Pero por las noches,
Cuando todos dormían.
Siempre salía en silencio a ver las estrellas.

Anhelando tanto volverte a ver.
Anhelando ver tus hermosos ojos que brillaban tanto.
Aquellos ojos que me recordaban al cielo nocturno.

Pero no siempre habían guerras.

La paz se instauró en el reino pocos años después.

Y tuve que regresar a la realidad.

En esos meses posteriores ellos vinieron nuevamente.
Mis padres me dijeron que me arreglara.
Que tu vendrías.

Fui tan feliz al saber que volvería a verte.
Que vería de nuevo a la persona que tanto anhelaba.

Pero luego recordé la triste verdad.

Ya no somos nada.

Hice lo mejor que pude cuando te vi entrando a su lado.

Apenas pude contenerme de correr y rodearte con mis brazos.
Abrazarte y suplicarte que regreses a mi lado.