The savior of an illusion || KarmalandV || Crazy K!Quackity

1. Primer acercamiento

Quackity se encontraba en su casa sentado en el comedor con unos papeles en mano los cuales demostraron que padecía de un transtorno mental que le impedía discernir entre lo real y lo creado por su mente.

— Joven, debe de tomar las medicinas indicadas aquí, es necesario para su salud, así que por favor...vaya a comprarlas —

Esas fueron las palabras de su psiquiatra el cual se veía sumamente preocupado, pero, sentía que sólo era una repugnante mentira para ocultarle la verdad que había en su mente, la verdad de que este mundo era falso.

De que todos sus compañeros estaban atrapados en este mundo debido a que se encontraban en coma, que él mismo era una simple alucinación, sabía que el psiquiatra sólo quería ocultarle esto. 

— Entonces...yo no soy real, sólo una jodida ilusión...¿Pero entonces cómo podría salvarlos de este coma? — Aquello era lo que pasaba por su mente, una y otra vez, estaba comenzando a colmar su paciencia.

Alterado ya, salió apresurado de su casa sin destino alguno, estaba enfurecido pero no sabía la razón de esto con exactitud, luego de unos momentos caminando por la zona, alguien llamó a la lejanía.

— ¡Quackity, Quackity! Que alegría verte — Exclamó quien parecía ser Rubius, quien se abalanzó al pelinegro para abrazarlo; sin embargo, en segundos fue empujado con brutalidad.

Cayendo al suelo, sólo mira a su compañero con una gran confusión en su rostro, Quackity sólo lo pateó molesto — Eres una puta molestia, déjame solo — Fue lo único que dijo antes de marcharse.

Rubius estaba totalmente confundido, ¿Por qué actuó de una forma tan agresiva? Sin más que decir, decidió mejor levantarse, darse la vuelta e irse a hacer su trabajo, tal vez Quackity sólo necesitaba estar solo.

El joven pelinegro sólo caminaba aturdido, no podía dejar de pensar en lo mismo de manera repetida ¿Cómo va a salvar a sus compañeros? ¿Qué puede hacer él para despertarlos del coma en el que ellos se encontraban?

Todas esas preguntas seguían sin tener respuestas alguna, mientras caminaba por el lugar de Karmaland, se detuvo en seco, recordando que debía de volver a casa ya que tenía que preparar la cena.

(...)

Durante la noche intento preparar su cena, su pareja estaba apunto de llegar luego de haber hecho un arduo trabajo en la oficina y él intentaba parecer lo más tranquilo posible fingiendo haber tenido una cita agradable y con avances en el psiquiatra.

Luzu llegó y le preguntó a Quackity si la consulta había salido bien. Él no contestó y todo lo que se había repetido horas antes de fingir estar bien se quebró.

Luzu no quiso incomodarlo y no hizo más preguntas, procedió a su cuarto y dejó que Quackity tuviera el espacio necesario para procesar su cita con el psiquiatra.

Mientras hacía esto, recogió la mesa y, comenzó a lavar los platos y cubiertos. Al acabar, se dirigía al baño para prepararse e ir a dormir.

Pasaban las horas, los minutos y los segundos pero Quackity no lograba conciliar el sueño que tanto anhelaba, su mente seguía activa con todo lo que pasó este día.

Su mente no paraba de hacerlo pensar que el psiquiatra, mas que buscar un bien para él, buscaba hacerle daño, esto lo estaba carcomiendo, cada segundo que pasaba de ponía más ansioso.

Llegó a ser atormentado a tal punto, que comenzó a sentirse inseguro en el entorno donde se encontraba, rasguñando sus brazos desesperadamente con la finalidad de sangrar y saber que era real aún.

Cuando sus brazos comenzaron a sangrar debido a las heridas, pudo calmarse, al menos un poco, pero no sentía que esto fuera suficiente, tal vez sólo debía comprobar de mejor manera su existencia.