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Lunes
Hoy desperté escuchando una alarma tan molesta, pues ni siquiera pegaba un rayo de luz por lo temprano que era y lo nublado que estaba, antes de bajar a desayunar decidí darme un corto baño; salí y me cepille el pelo y lo deje suelto, me puse el uniforme y baje a desayunar.
Al bajar me encontré a mi hermana Ayano.
-¿Estás lista para la nueva escuela?-
Preguntó sin mirarme.
-Claro que lo estoy-
Dije sin ganas.

Ayano como siempre preparo el desayuno, nos llevó poco tiempo el acabarlo, después de eso simplemente no lavamos los dientes y fuimos hacia el colegio.

Guardamos silencio durante todo el camino, pues ninguna tenía ganas de hablar, ni siquiera una mirada nos dimos.

Al llegar nos separamos y fuimos hacia nuestros salones, pues nos habían tocado diferentes.

...
Ayano:
Caminaba buscando mi salón, iba tan distraída que choque con un chico, al verlo a los ojos, no evite enamorarme de el, es el chico por el que tanto esperaba, el chico del que hablo mi madre, el único que haría demostrar mis emociones
Me ayudó a levantarme, simplemente ví como se iba.
Él debía ser MÍO...

...
El día siguió normalmente, sin nada relevante.
Rápidamente llegó la hora del almuerzo; las hermanas Aishi se encontraron en los pasillos para comer sus alimentos juntas.

Se sentaron en una banca en la parte de arriba, pues ninguna tenía ganas de comer en la parte de la cafetería.

-¿Y no ah ocurrido nada durante el poco tiempo que has estado aquí?-
Preguntó Ayano para después comer un poco de su bento.

-No ah pasado nada, simplemente cosas aburridas-
Respondiste haciendo lo mismo que Ayano.

-Deberiamos explorar un poco el colegio, ¿no lo crees?, no eh echo ningún amigo o hablado con alguien-
Le dijiste.

-Tal vez deberíamos, pero, no tengo ganas de hacer algún amigo por ahora-
Respondió seriamente.

Guardaste silencio, pues no había más cosas de las que hablar.

Observabas todo tu alrededor, habían algunas personas hablando, pero realmente poco te importaba, estabas tranquila, hasta que decidiste voltear la mirada hacia tu hermana.

Su mirada no era muy amigable, era una mirada asesina y llena de celos, viste el punto de vista de tu hermana, ella estaba centrada en un chico el cual comía sus alimentos junto a una chica de coletas anaranjadas.

Simplemente decidiste irte, ya habías acabado tus alimentos así que no había más que hacer, no tenías ganas de ver a tu hermana de esa forma, tú ya sabias que era lo que le sucedía.

Mientras caminabas por los pasillos, estabas tan centrada pensando en Ayano que ni siquiera te diste cuenta que ibas a chocar con alguien, sentiste como tú cuerpo iba cayendo, pero unos brazos lograron atraparte.
Volteaste hacia arriba y viste ese rostro tan amable, ese rostro que te haría caer en la locura...

-¡Lo lamento!, no debí ir tan rápido-
Escuchaste su dulce voz.

-¡No!, fue mi culpa, estaba un poco distraida y no ví que estabas frente mio-
Respondí con nerviosismo.

-Insisto, fue mi culpa, ¿estás bien, no te lastimaste?-

-Estoy bien, afortunadamente lograste agarrarme antes de caer-

-Eso es bueno, en serio perdón por esto, ya debo irme, espero que nos veamos luego-

Observé como se alejaba, era tan lindo, su mirada me atrapaba y hacia que me perdiera en ella, era perfecto.

Salí de mi trance al recordar lo que iba a hacer, pero lamentablemente el tiempo de descanso acabó, ¿en serio se había ido tan rápido con el echo de que estuve a punto de caer?, no tenía ni idea, solo camine rápidamente hacia mi salón.

El tiempo pasó rápido y llegó la hora de la limpieza, no tenías ni idea de que hacer, así que me acerque a un chica peli verde.

-Disculpa, con sabes soy nueva aquí, pero no tengo mi idea de que hacer, ¿crees que puedas ayudarme?-

-¡Claro! T/n Aishi, ¿Verdad?-

Asentiste a su pregunta.

-Yo soy Midori Gurin, ahora vamos a trabajar-

La chica era muy entusiasta, el tiempo pasó rápido con aquella chica, tenía una gran paciencia que era de admirarse.

Pronto llegó la hora de irme, pues no tenía ninguna actividad que hacer.

La chica peli verde o más bien Midori me pidió mi número para seguir hablando después, se lo di y me despedí de ella; espere fuera de la escuela a Ayano, estaba tardando demasiado, hasta que por fin llegó.

Caminamos hacia la casa, está vez quería hablar con ella, no es algo que hacíamos mucho, pues no compartimos gustos y ni sabemos relacionarnos bien, solo por esta vez pensé que sería bueno tener una pequeña charla con ella.

-¿Cómo te fue en tu día?-
Le pregunté.

-No tengo nada que contar-
Dijo seriamente.

-¿En serio nada?, debes tener algo, ¿por qué no me dices algo sobre ese chico al que tanto mirabas?-

-Eso no debe ser de tu interés-
Respondió con un poco de enojo al parecer.

-Esta bien, solo quería saber, no hay necesidad de responderme así, odio cuando te pones de esa manera-
Respondí con un tono cansado.

-Mejor guarda silencio si no quieres problemas, lo menos que quisiera en este momento es alguna discusión-

Llegamos a la casa y cada una se fue a su habitación, no teníamos ganas de hablar.

Nos quedamos encerradas en el cuarto y solo bajamos para comer, Ayano se había quedado con mi madre hablando, yo no quería así que subí a mi cuarto y me quedé todo el resto del día ahí, solo quedaba esperar al próximo día.

Espero encontrarme de nuevo con ese chico tan lindo con el que había chocado, en algún momento quedé dormida, no pude evitar soñar con el.

Creo que estoy enamorada

Aceptar Mis Raíces~[YS Budo×Reader Fem]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora