𝑫𝑬𝑨𝑹 𝑫𝑰𝑨𝑹𝒀 ━ 𝑆𝐶𝑂𝑂𝐵𝑌 𝐷𝑂𝑂! (fred jones)

fantasmas.

capítulo tres.
fantasmas.

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Odette despertó con bastante entusiasmo, después de bañarse y arreglarse salió de su casa en dirección a la de su ahora nuevo amigo Shaggy Rogers.

Sus padres realmente no eran un problema al haber sido suspendida de clases, prácticamente se la pasaban sumidos en su trabajo los últimos días, era mayormente por eso que pasaba gran parte de su tiempo leyendo aquellos libros de misterio que tanto le encantaban.

— Oh, hola Fred — sonrió al ver al chico llegando prácticamente al mismo tiempo — Que gran casualidad, ¿no?

El mencionado sonrió metiendo ambas manos en su chaqueta — Vaya que sí — realizó un gesto con su cabeza inclinandola hacía un lado de forma ligera—.

Odette le dio un golpecito causando que ambos rieran levemente.

— Bien, creo que debemos tocar.

El castaño golpeó con suavidad la puerta, siendo esta abierta casi al instante por el dueño de dicha casa.

— ¡Fred, Odette! — los saludó —.

— Hola, Shaggy.

— Bienvenidos a la fiesta.

— ¿Eh? — el deportista giró a verlo una vez estaban dentro —.

— ¿Fiesta?

— Ah si, claro — él sonrió — Siempre hay fiesta en mi sótano. Pueden darme sus abrigos.

Ambos se voltearon a ver inspeccionando y confirmando que ninguno llevaba dicha prenda.

— Ah — Shaggy exclamó cuando se percató — Oh por favor, siéntense.

Odette sonrió y los dos avanzaron para adentrarse más.

— Siéntanse cómo en casa.

Odette y Fred se dirigieron al sillón del centro dispuestos a tomar asiento.

— Bonito lugar, Shaggy — el chico comentó para sentarse —.

— Gracias.

Ambos se acomodaron poco antes de que el sillón cayera bruscamente de un lado, causando que la chica chocará inmediatamente contra el cuerpo del joven.

— Ah — Odette se levantó al igual que él — Lo siento tanto.

— Es un sillón antiguo — sonrió nervioso — No te preocupes.

— Sí — bajó la mirada levemente —.

— Y patas, viejas...

Shaggy se aproximó con una bandeja llena de bocadillos y un entusiasmo que no se le borraba por nada.

— Bon appetit — les ofreció causando que ellos tomarán uno con rapidez —.

— Gracias — dijeron al unísono probando aquél alimento —.

— Oh, que delicia — Fred dijo dándole una mirada breve a la chica para saber su opinión —.

— Sí, son muy ricas — afirmó sorprendida — ¿Que son?

— Realmente no tienen nombre — contestó él con la boca ocupada comiendo más de esas galletitas — Es algo que yo inventé — Odette observó como Fred seguía mordiendo y saboreando dicho aperitivo asintiendo con la cabeza — Ya saben, huevos, agua, harina, cocoa, azúcar...

Shaggy se giró caminando hacía otra dirección — Y un poco de comida para perros para la textura — ambos estudiantes escupieron de inmediato la galleta dejándola al lado —.