-Invocación fallida- (Mitsutai)

-invocación-

Era domingo 30 de octubre, un grupo de amigos no particularmente listos se habían juntado para hacer una suerte de ritual ni bien dieran las 00 hs del día 31, halloween. ¿por qué? ni idea, solo creían que podía ser divertido

Baji los había convencido de ir y de paso quedarse en la casa de quien tuviese el valor de arriesgarse a tener un demonio atado por el resto de la eternidad, todos se asustaron demasiado como para intentarlo incluso si no querían admitirlo; Draken no podía tener a todos sus amigos en su pequeño cuarto viviendo en un burdel, a Mikey se lo denegaron por no querer causarle problemas a su abuelo con un montón de chicos tontos como él, Baji dijo con orgullo que su mamá lo regañaría, Pah chin dijo que podrían asustar a su perro o algo así, la verdad estaba muy asustado, Kazutora dijo que ya tenía su propio demonio allí. Nadie quiso preguntar pero él mismo se rió y dijo que era una broma y su mamá no quería que se quedara despierto hasta tarde. Al fina fue Mitsuya quien resignado aceptó, de todas formas sus hermanas estarían en casa de sus abuelos por al menos una semana mas ya que su madre no estaba ganando lo suficiente, tema del que prefirieron pasar.

Se reunieron torpemente al rededor de un círculo de sal, cortesía de Pah con la intención de mostrar que también quería colaborar (aunque mas bien pensaba en su seguridad, pese a que mas bien era para fantasmas), un pentagrama que había sacado de un viejo libro de la biblioteca escolar, no solía pasarse por allí ,mas bien fue gracias a Chifuyu que lo forzó a buscar sus propias bibliografías. Gritaban como tontos, esperando que comenzara el estúpido ritual de lo que debería ser un llamado al mismísimo Satanás.

"Ya ya, no se pongan ansiosos, no es fácil leer esto" -entrecerrando los ojos y acercando el libro, había olvidado lo ignorante que era- "oye, espera-

"déjame ver" -Mikey le sacó el libro, tampoco fue de mucha ayuda, le dio la vuelta y frunció el ceño- "esto es imposible" -estiró hacia el mas alto- "Kenchin, hazlo tú"

"¿ah?" -indignado- "¿bromeas? esta ni siquiera fue mi idea, que lo haga el tonto de Baji" -cruzándose de brazos sin quitarle el ojo de encima al azabache-

"cállense, puedo hacerlo" -le quitó el libro indignado- "se que, AH!" -giró repentinamente, molesto, el libro le había sido arrebatado- "MITSUYA!"

"olvídalo, esto no terminará nunca" -manteniendo la compostura, alejando el libro de Baji quien insistía en sacárselo- "esta es mi casa, ¿o no? al menos déjame hacer esto rápido" -viéndolo con una leve molestia- "acabemos con esto y veamos unas películas"

Nadie mas se quedó, incluso Baji se sentó resignado sin quitar el puchero de su rostro, su orgullo había sido fuertemente herido. Kazutora se le rió y por poco empiezan una riña, era inevitable con personas como ellos. Finalmente Draken cayó al de larga cabellera y Pah chin llamó la atención del bi color, por suerte era un buen amigo y se mantendría cerca suyo para que dejara de cagarse en los pantalones; un poco burlón, si, pero con buenas intenciones.
Mitsuya respiró profundo sin tomárselo muy en serio, mas no mentiría, las letras si que eran un poco complicadas de entender, sin embargo prosiguió con la mirada fija al frente, de reojo denotó el temblor de dos de sus amigos, quienes se lo tomaban tal vez demasiado en serio.
Para su sorpresa una exagerada cantidad de humo comenzó a salir del pentagrama que estaba dibujado dentro del círculo de sal, los trazos se iluminaban en un intenso carmesí y comenzaba a temblar. El de la cicatriz se aferró fuertemente a su amigo, agachándose e intentando ocultarse pese a ser notablemente mas robusto, el mas bajito se sobresaltó un poco y buscó refugio en el trenzado, quien comenzaba a sudar con los ojos bien abiertos del asombro; el genio de la idea comenzó a tartamudear.

"e-e-esto...es ...p-p-parte de una broma...c-c-cierto Mitsuya?" -mirándolo con cierta incredulidad y terror, fingiendo una sonrisa- "...¿Mitsuya?...oi" -la falta de respuesta lo aterró-