Fem Quackity, un poco de angst, fluff, un poco de temas sensibles, cubitos skater/streamer Au
Había pasado un tiempo desde que pudieron ver a Karl, Sapnap y Quackity se encontraban sentados en el sofá, con su mirada perdida en el sofá. Sabían que Karl estaba afuera ese fin de semana por destinos de sus propios vídeos para grabar afuera.
Pero eso no era lo que les generaba preocupación, los dos amantes estaban bien con que el alto saliese de casa para hacer su trabajo, lo que no estaba bien fue que recibiera una llamada de Jimmy diciendo que Karl no había estado comiendo absolutamente nada, solo tomando agua.
Se atragantaba en agua y eso no estaba del todo bien. Jimmy se preocupaba por su amigo y sabía que los amantes lo harían más.
Por eso había decidido decirles, y preguntarles si él había comido algo antes de salir, para poder ayudarles en algo.
Quackity recuerda que ella hizo la comida un día antes de que su novio más alto saliera de casa, pero no estaba segura de si había comido o no.
Ya que Sapnap había estado practicando el patinaje, no le había prestado mucha atención a sus amores, debía ganar la carrera junto a Dream o quedarían descalificados, y en realidad no era lo que querían, así que sus parejas entendían porqué no estaban junto a ellos los últimos días.
Quackity juntó sus manos, tratando de recordar si su alto novio sí había comido, por lo que sin decir nada se acercó a su cocina, a la estantería y las abrió, observando la caja sin abrir de las pop-tarts que tanto adoraba Karl.
Sintió que sus ojos se llenaban de lágrimas.
—¿Cielo, corazón, qué pasa?— el azabache mayor se acercó a la mujer que aún miraba a la estantería, dirigió su mirada al lugar de madera, dándose cuenta del porqué de la mirada de la bajita.
—No se llevó ni una...— murmuró, bajando su mirada.
El azabache abrazó a la menor con fuerza, esperando a que pasara su temblor y sus ganas de llorar.
—Llamemos a Jimmy, y pregúntemosle si pueden terminar y traer a Karl, ¿te parece?— susurró el mayor para tranquilizarla. —Tal vez sea mejor que cocines algo, sabes que Karl ama tu comida.— acarició su mejilla, besando su frente.
Y eso haría Quackity, recibiría a su amado castaño con mucha comida y cariño, porqur no quería volver a pasar con él lo que antes había sucedido con ella.
Así que cada uno agarró su camino, no sin antes darse un rápido abrazo y pequeño beso que los tranquilizó un poco.
Sapnap se dirgió a la sala, agarrando su celular para entrar a los mensajes del contacto de Jimmy, pulsando el botón de llamar, sin vídeollamada.
Llevó su cuerpo hacia la parte de arriba, para poder ir a buscar sus audifonos, pero en menos de dos pitidos, la otra línea contestó.
—¿Sapnap, hola?— escuchó una voz suave, se oía débil. Ese no era Jimmy.