Capítulo 1

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ᦔꫀડᥴꫀꪀᦔⅈꫀꪀ𝕥ꫀડ ᦔꫀ ꪶꪮડ 𝟙𝟚

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Cαρíƚυʅσ 2

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John sigue distraído correteando por aquel campo de flores, estaba féliz, algo que pocas veces ocurría de corazón, a su punto de vista aprestaba ser el mismo, llegando a describirse a si mismo como alguien: violento, dictatorial, explosivo, mandon e incontrolable.

Mientras tanto. Los demás de la clase estaban a rededor de su profesor, curiosos por la razón de su nerviosismo.

- ¡E-es imposible para N-nosotros estar aquí! - Sus estudiantes lo miraban confusos, no sabían de lo que estaba hablando - Es posible que hayamos muerto de una manera tan instantánea, digo, hay muchas maneras de morir sin que te des cuenta, pero sigue siendo imposible para nosotros entrar en este lugar divino - El profesor ignoraba a sus estudiantes, en este momento solo estaba deambulando por los valles mentales de su cerebro. Sus estudiantes, por otro lado, se preocuparon cuando el profesor mencionó la posibilidad de que hayan muerto de manera instantánea, sin siquiera darse cuenta de que estaban en peligro y luego de un rato comenzaron a entrar en pánico. Unos lloraban, otros estaban tranquilos a aceptando su final e intentando descansar o mirando a sus alrededores.

El profesor continuó pensando en voz alta hasta que una estela de fuego lo sacó de sus pensamientos.

- ¡Vaya! Traje más de la cuenta  - Hermes irrumpió en sus lamentos/festejos, llamando la atención de todo el grupo, incluso de John, quien parecía ahora igual de confundido que sus compañeros.

- ¿¡Quién diablos eres tú!? - Seraphina gritó intentando activar su habilidad, fue inútil, había sido deshabilitada - ¿¡Q-QUE DEMONIOS LE HICISTE A MI HABILIDAD IMB- - John la detuvo justo a tiempo, evitando que se fuera de estúpida e insutara a un dios.

- ¿Me puede repetir lo que iba a decir esa jovencita? - Preguntó Hermes con curiosidad, no había escuchado bien lo que dijo.

- ¡I-I-I-imprescindible! E-eso fue l-lo que ella quiso decir "¿¡que demonios le hisiste a mi imprescindible habilidad!?" jeje - El profesor se apresuró a hablar por su estudiante, si Seraphina llegaba a terminar esa oración todos morirían en ese lugar... O eso era lo que ellos creían

- ¡Oh! Entiendo, creo que ustedes, los humanos, están volviéndose muy adictos y orgullosos con esas habilidades que tienen, espero que no intenten insultar a algún dios por su soberbia - Tenía una sonrisa en el rostro, mirando como todos los estudiantes lo veían confundidos. - ¡Qué tonto que soy! - Se golpeó la frente con la palma de la mano - ¡Olvidé presentarme! Soy Hermes, el mensajero de los dioses y el que ocupa el puesto número 8 entre los olímpicos - Con felicidad saludó a los estudiantes, aunque realmente ignoraba a la mayoría de ellos y sólo se enfocaba en el chico con el casco de gel.

Descendientes de los 12Donde viven las historias. Descúbrelo ahora