Historia de un lobo

La misma historia

- Y así fue como caperucita venció al lobo junto a su abuelita y el cazador...fin. -

Finalizó aquella mujer que vestía con un sencillo vestido de color azul y un par de flores que sostenían de alguna manera su larga cabellera rubia creando así una trenza. En aquel lugar habían tres hadas, un duende, un elfo y un lobo ancestral el cual, al oír la historia, completamente indignado volvió a su forma humana dejando ver a un muchacho joven de cabellera negra y rebelde, ojos azules y piel blanca aunque, de igual manera, parecía algún que otro chico de clase baja de algún pueblo humano que había mas allá.

- ¿Otra vez las típicas historias donde los lobos somos los malos? estoy comenzando a tomarme esto como algo personal...-

- Oh querido, son antiguas leyendas...seguramente la gente de ahora no pensará tal cosa. -

- Lo dudo mucho, además que no olvidemos que eso pasó de verdad y la gente se lo creé cuando sabe que hubo verdaderos sucesos acerca de eso, tal vez diferentes pero...de igual forma no cambian su opinión acerca de los lobos. -

Dijo uno de los duendes mientras que el lobo le miraba con el ceño fruncido y abrió la boca para poder replicar pero una de las hadas habló hechandole mas leña al fuego.
- Al menos que alguien relate una historia verdadera donde los lobos no sean los malos nadie va a querer creerselo. Además, a estas alturas los lobos ya os habéis ganado ese titulo. -

- Oh, por favor no sean así, Demián eres un lobo bueno y tienes razones para estar enojado por esto pero entiende que son leyendas, nada se puede hacer...-

- Seguramente algún día escribirán la historia de otro lobo, tal vez sea buena...aunque, lo dudo. -

Dijo el otro duende haciendo que, Demián, no tuviese otra mas que salir corriendo de allí completamente enojado pues el decía tener la razón y quizás la tenía ya que solo escuchaba historias de lobos malos que al final caen ante los héroes. Se sentó en un tronco que había caído el invierno pasado y dio un suspiro un tanto...malhumorado.

- Yo les enseñaré a que no en todas las historias el lobo debe ser el malo...pero...¿como lo haré? -

Dijo comenzando a pensar hasta caer la noche y, al momento de alzar la vista para poder observar el cielo completamente estrellado, una brillante idea vino a su cabeza.