✰𝑩𝒆𝒖𝒕𝒊𝒇𝒖𝒍 𝑭𝒂𝒎𝒊𝒍𝒚✰

#1: Recién Nacido.

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A pesar de todo, tu nunca dejaste de sonreír, por eso quiero, que al cumplir mi sueño, tú seas la que esté siempre ahí.
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Luffy tan solo se dedicaba a mirarlo.

Él solo estaba ahí, quieto, con ambas manos a los costados de su cabeza, con sus pies en una forma rara, pero al parecer cómoda, puesto que no se había movido en toda la noche, y con esa carita de molestia, ¿O era cansancio? Era realmente difícil dar con la respuesta correcta, por qué desde que llegó, solo había llorado y comido, por lo que no sabía mucho de él.

-¿Por qué no vienes a dormir, Capitán? -Pregunto la mujer de cabellera naranja, mirándolo desde la cama.

Luffy se giro hacia ella y negó.

-Tengo que cuidar de ambos... -Dijo dándole la espalda- Tu duerme..

-Luffy, él estará bien, ¿Por qué no te preocupas un poco por ti? Ya llevas 2 días sin dormir..

-Puedo durar más, mucho más.. -Dijo, sin apartar la mirada del bebé.

El capitán de los sombreros de paja era padre, así es, padre, su pequeño niño había llegado al mundo hace dos días y Medio, en medio de la noche, como todo un escándaloso.

Luffy estaba maravillado con ese pequeño ser, lo espero por tanto tiempo, por tantas horas, recibió tantos regaños, y él, solo dormía y comía sin parar todo el día, sinceramente eso lo decepcionó un poco, Sombrero de paja quería saber que cosas podía hacer el niño, que le gustaría hacer, que cosas comería, hasta ahora, solo tomaba de los pechos de Nami, pero luego de una charla y unos comentarios de toda su tripulación, entendió que era algo normal, algo perfectamente normal, pues era un bebé, alguien que aún no podía ni siquiera estar sentado por su cuenta, o tan solo abrir los ojos sin cansarse.

-Se que tienes miedo de que algo le pase.. -Comenzó a hablar Nami, quien se encontraba sentada en la cama, trataría de convencer al pirata- Pero mira a tu alrededor, estamos en una de las habitaciones más seguras del barco, Brook tiene una vigilancia excepcional, y no creo que Zoro o Sanji estén dormidos.. -Con eso ya había llamado la atención de su pareja- Ven y acuéstate conmigo.. -Dijo extendiendo su mano hacia él- Naoki estará bien, es tu hijo después de todo..

Luffy vio con atención como Nami sonreía con ternura, llamando completamente su atención.

Sombrero de paja estaba asustado de cierta forma, confíaba en sus amigos, y que ellos estuvieran al pendiente del peligro lo hacían sentir bien, pero estaba asustado que lograrán pasar de ellos, y quisieran llegar hasta Nami y su hijo, estaba aterrado de que algo malo les pasará, sobre todo a Naoki, quien apenas podía abrir sus ojos, no podría defenderse, por eso se había sentado a su lado, pendiente de cualquier cosa que quisiera dañarlo.

-¿Luffy? -Nami volvió a llamar, el chico se había pedido en sus pensamientos, por lo que creyó que iba a rechazar su propuesta.

El joven reacción y se levantó llevando la mano a su sombrero, el cual se quito, dejándolo a los pies del niño, quien ni siquiera se movió ante aquello, con eso, se dió vuelta y camino hacia la cama, donde Nami lo esperaba con los brazos abiertos y una gran sonrisa.

-¿No le pasará nada, verdad? -preguntó, una vez que se acomodó con Nami para dormir.

-¿Tu lo permitirás?

-¡Jamás!

-Entonces estoy tranquila.. -Susurró quedándose dormida.

Luffy asintio, miro hacia la cuna, él no dejaría que nada dañará a su bebé, primero muerto.

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Dos Semanas Más tardes

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Nami ya había logrado recuperarse, no al completo, pero ya lograba salir de la habitación con el bebé en brazos, la tripulación estaba encantada con el pequeñín, pues era una cosita tan hermosa, que no podían enviar querer abrazarlo todo el día.

El bebé tenía bastante rasgos de su papá, tanto en la forma de su nariz, cómo la de los ojos, y el cabello era el mismo modelo, era una mini versión de Luffy, aunque con el cabello un poco más corto a los costados, y con un tono naranja bastante sutil, eso era claramente una hermosa referencia a su madre, la cual lo miraba con orgullo y amor, su nombre Naoki, fue idea de Chopper, quien los ayudó con la elección, puesto que aún no tenían nada en mente, significando "Honesta paz" Era el mayor tesoro de ambos, hasta los momentos.

Luffy estaba en la cabeza del león, mirando el mar como de costumbre, se sentía bastante feliz y tranquilo, no muy lejos de él, Nami y su hijo descansaban junto a Robin, en unas cómodas sillas, bajo un sol bastante brillante, y una suave brilla, el día yacia de maravilla.

-Vaya que si es parecido a Luffy.. -Comentó Robin, quien para ese momento veía como el pequeño Naoki terminaba de ser alimentado por su madre- ¿Que tal el apetito?

-Por ahora, solo toma grandes cantidades de leche. -Dijo entre risas nerviosas, realmente esperaba que no hubiera sacado el apetito de su padre.

-Aqui tienes Cisne Nami.. -Llegó Sanji con unas bebidas- Se que debes estar bastante cansada de amamantar, esto te ayudará.. -Comento para darle la bebida- Y no creas que me olvidé de ti, hermosa Robin.. -corrio a su lado- te prepare el té, justo como me lo pediste..

-Muchas Gracias Sanji..

-¿Té? -Nami la miro sorprendida- ¿Que paso con el Café? Creí que te gustaba más..

-Han pasado cosas.. -Dijo con suavidad- Y quiero probar cosas nuevas..

Nami no entendió muy bien lo que estaba diciendo, pero lo dejo de lado, Robin le diría tarde o temprano.

-Luffy.. -Llamo mientras se levantaba- ¿Puedes tomarlo por un momento?

El pirata se giró con rapidez, asintio, y tomó al niño estirando los brazos, cosa que molestó a Nami, pues le había dicho en infinidad de veces que no hiciera eso al tomar a su hijo.

-¿Que te he dicho de eso?

-Él está bien Nami..-Dijo sin apartar la mirada de su hijo- ¿No es así? Tu mamá solo exagera.. Shishishishi

La peli-naranja rodó los ojos, mientras se sentaba con cuidado en la silla, Robin rio ante aquel momento, Luffy era bastante cómico.

Por su parte, el Pirata miraba a su pequeño hijo, quien también le sostenía la mirada, quizás sorprendido de que ahora fuera él quien lo cargará, pero no le importó mucho, siempre procedió a acomodarse, procediendo a dormir de nuevo.

-Naoki.. -Llamo en susurros, el bebé abrió sus ojitos con cuidado, y lo miro con atención- El mundo es bastante grande hijo.. -Comento con suavidad- Y vas a conocer bastante, te van a gustar muchas cosas, así como vas a odiar muchas otras, pero de eso se trata, de aprender y experimentar.. ¡Ya quiero ver qué cosas te van a gustar!

El bebé no entendía ni una sola palabra de lo que decía su padre, pero le daba gusto verlo tan feliz, así que en respuesta, cerro los ojos acurrucadose en su pecho.

Nami los miraba con ternura, Luffy era bastante bueno, quien lo diría, al principio ni sabía cómo se hacían los bebés, y ahora ahí estaba, dándole consejos a su pequeño.

¿Algo mejor que esa imagen?

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