Love Me Again ✦ KookMin [OS]

Único.

Jimin salió de su casa con la mirada baja, luego de las órdenes de su madre, completamente decaído. Sus ánimos eran así desde hace dos meses y seguían igual.

Que Jungkook lo persiguiera y siguiera insistiendo, no le ayudaba en nada.

Se sentía culpable. Pero era un joven inmaduro, inexperto e inseguro.

De hecho, ambos lo eran en cierto modo.

Con sus 17 años de vida, ambos no sabían de que trataba el mundo, y con pequeños problemas que se interpusieran en su camino, los complicaba y estresaba. A veces en vez de encontrar una solución, se rendían, y eso era lo que Jimin había echo.

Con las dos bolsas de basura en cada mano, fue hasta la esquina de su pasaje. El bote de basura se encontraba allí. Tiró ambas bolsas, sacudiendo sus manos pues se había manchado un poco. Hizo una mueca de asco, dispuesto a volver a su casa. Pero antes de voltear de regreso, una figura al otro lado de la calle llamó su atención. Era una persona.

Jungkook le miraba desde la otra esquina, cruzando la calle, con un abrigo largo para espantar el frío de la noche, un gorro cubriendo su cabello castaño, y las timberland que usaba seguido.

Jimin sintió una presión en su pecho, y soltando un suspiro, bajo su mirada. No sé sentía listo para mirar a Jungkook a los ojos. De hecho, luego de "ello", nunca lo había vuelto a ver a los ojos. Sentía que volvería a caer, y el no quería eso.

Sintió unas pisadas acercarse hacia su persona. No era necesario levantar su mirada para saber de quien se trataba.

En cuanto vio esa botas color mostaza frente suyo, su nerviosismo aumentó. Los latidos de su corazón se hicieron más rápidos y sus manos comenzaron a sudar.

No le gustaba encontrarse en esa situación.

El silencio gobernó el ambiente por varios minutos. Un silencio que claramente, el más alto de los dos, se encargó de romper.

- ¿Enserio no quieres hablar de lo que pasó? - Jimin mordió su labio inferior al escuchar la grave voz de Jungkook, sus ojos picaron y su nariz también.

- No creo que sea necesario.- La calle estaba vacía, por lo que ambos estaban solos ahí.

- Ya pasaron dos meses, Jimin. Y me terminaste de la nada sin motivo alguno.- Jungkook sonaba dolido, y Jimin se sintió peor. Las lágrimas amenazaban en salir de sus ojos.

No respondió. No sabía que decir. Sentía que si hablaba, iba a arruinar todo, sin saber, que su silencio lastimaba aún más, si era posible, al contrario.

- ¿Ya no me amas? - Jungkook respiró con dificultad. Jimin sintió el impulso de decirle que aún le quería, que aún lo amaba. Pero no se atrevió.

Jungkook estaba dolido. Esos dos meses luego de que Jimin le terminara, habían sido una tormenta. El más bajo no le había dicho la razón, y cada vez que se le acercaba en la escuela, el más bajo encontraba la manera de escapar o esconderse de él. Por lo que el día de hoy había decidido ir hasta su casa, pues el rubio no podría escapar de allí. Que le encontrará en la esquina de su pasaje, le había facilitado las cosas. No quería pasar un momento incómodo con los padres de Jimin, e incluso con el hermano menor del rubio.

Los amigos del más bajo tampoco le habían ayudado, respondiendo frases como "no puedo decirte, eso es trabajo de Jimin" "aún no sé siente listo" "acéptalo" e incluso, "olvídalo de una vez". Esa había sido la que más le dolió. Pero no podía olvidarlo. Jimin era su primer todo, incluso el había sido el primer todo del rubio. Por lo que no entendía la razón por la cual le terminara.