Entre Alfas (KNJ, MYG) Resubiendo

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Era un día cualquiera en la vida de Glory, en su cuaderno había anotado ya la fecha del día adornada con miles de dibujitos, unos pocos rayos de sol entraban por la ventana del salón, iban hacer las ocho de la mañana llego temprano gracias a que su hermano tenía junta con la mesa directiva de la universidad, se puso a jugar con su pulseras ya cansada de estar ahí, estaba muy aburrida tenía más de media hora que sus amigos le habían dicho que ya iban a llegar, esos mentirosos, cuando escucho la puerta del salón abriéndose se emocionó creyendo que eran ellos pero solo eran Namjoon y su pareja Jihyon.

—No, yo quería estar a solas un ratito con mi cariño, y tenías que estar aquí—

—Es un salón de clases, no un motel querida, si quieres privacidad renta un cuarto— Jihyon le lanzo una mirada de odio para tomar a Namjoon de la mano y salir de ahí.

Ella sabía que su comentario no venía al caso, no cuando la mayoría de las parejas de la facultad siempre están de melosos, pero no es algo que pudieran evitar, es solo el instinto o su envidia la que hablaba ya que ahí estaba ella a sus casi 20 años aun virgen y sin pareja era raro en una omega, y aun más raro en ella cuando su aroma eran tan irresistible para los alfas, tenía a media facultad a sus pies deseosos de que los dejara ser los primeros, pero el único alfa que había considerado alguna vez para poder poner fin a su virginidad se acababa de ir por la puerta con otra omega.

—A m i g a, ¿Qué le dijiste a Jihyon para que se fuera enojada? — Floreta su mejor amiga acaba de llegar, era una beta adorable muy parlanchina también, muy guapa, su cuerpo era esbelto su piel morena y su cabello negro eran el conjunto adecuado para esa cara perfilada y sus enormes ojos cafés.

—No le dije nada, solo se molestó de no poder follarse a Namjoon en el salón antes de entrar a clases.

—Hasta para eso debería de haber limites— Miranda era otra beta amiga de Glory, su apariencia era todo lo contrario que la de Floreta ella era un poco más pequeña de ojos rasgados usaba lentes que parecían más grandes que su rostro, su piel era pálida como la nieve y sus cabellos rojos y rizados, era como una caricatura andante, tenía un carácter noble y tranquilo.

—Él debía ser tuyo, solo verlo con ella me revuelve el estómago, digo si no fuera por tu hermano en este momento puede que hasta marca tuvieras— su amigo omega había llegado con su cinismo de siempre, él era muy coqueto y le gustaba jugar mucho con los alfas, era el más experimentado del grupo, se podía ligar al alfa o beta que el deseara, era su aroma a vainilla, las caderas pronunciadas, sus piernas delgadas y un rostro que parecía tallado por algún dios los ojos eran grandes y azules, su cabello rubio y plateado todo creando la combinación perfecta para que Jimin atrapara al alfa que le interesara.

—Jimin estoy agradecida de que mi hermano que sea tan sobreprotector, de no ser por él y mis otros hermanos, ya estaría más que marcada creo que hasta con cachorros, pero no es algo que este en mis planes por el momento.

—Tienes un don y lo desperdicias con tus cosas Glory.

—Es una maldición— lo dijo mientras acariciaba las pulseras que llevaba en ambas manos.

—Esas pulseras combinadas con tu horrendo carácter es lo que hace que sigas sin pareja después de dos años aquí nena.

—No tengo mal carácter es solo que no me someto como desean las demás alfas, además sabes qué pasa si me quito las pulseras.

Ambas pulseras desprendían un aroma a Sándalo con Café era el aroma de su hermano mayor, lo usaba para que su aroma natural no se notara tanto ya que este era demasiado fuerte y atrayente, los supresores por alguna razón no servían en ella y esas pulseras eran un salvavidas.