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Miraba por la ventana, viendo las formas de las nubes en el cielo, esperaba a que una tuviera algo diferente pero todas se veían iguales, apreté un poco el agarre flojo en mi marioneta
Acaricie un poco esta, por su suave lana, mire hacia adelante viendo que delante nuestro había un camión de mudanza
‐ ¿Ya llegamos?
Pregunte a la mujer que manejaba, esta parecía buscar con la mirada algo
‐ Ya falta poco.
Me respondió, al pasar algunos minutos más en total silencio sentí como el coche había parado, habíamos llegado, miré por la ventana la gran casa donde estaríamos en Mulhoven New Town, realmente no quiero estar aquí pero mi madre tuvo esta gran decisión con tal de no ver la cara de un señor con cabello azul
Baje el auto apenas me indico la mujer, mire a los trabajadores empezando a sacar cajas y cosas pesadas dentro de la casa, me quedé parada observandotodo mientras veía alrededor del vecindario, todo se veía tan pacifico sinceramente
De inmediato mire hacia la casa de en frente, notando una intensa mirada, era un niño de mi edad, tenía ojos azules y cabello castaño con un overol azul
Para no incomodar las cosas sonreí unpoco y salude con la mano lentamente, este no pareció agradarle ya que giró su cabeza rápidamente y cerró las cortinas, me entristeció un poco, casi nuncatengo amigos de mi edad
Volteé a ver a mi madre que hablaba con un hombre y ella firmó algo y le dio algo de dinero para que luego estos se fueran, iba sentarme en el suelo para esperar hasta entrar hasta que oí su voz enojada
‐ ¡No te sientes en el suelo! Vas a ensuciar tu vestido.
Rápidamente me pare sacudiendo la tela Blanca, aunque esta no se había ensuciado mucho realmente agache la cabeza por su tono de voz
‐ Vamos, entra a la casa, tengo muchas cosas que ordenar
Asenti para dirigirme a la entrada y abrir la perilla, todas las casas parecían iguales solo que sus puertas cambiaban de color, la nuestra era una Blanca, bastante común para decir verdad, si fuera yo quien pintara las puertas lo haríacreativamente! Con muchos colores y dibujos
