Despertó sudorosa bajo las gruesas y pesadas sabanas. Su mente daba vueltas, ¿Había soñado que el dueño del hotel era un vampiro? Se sentía demasiado real para ser un sueño, y aun así demasiado difuso para ser real. Tras cambiarse bajo al primer piso, en busca del comedor. Se sorprendió al ver tan diferente el lugar con respecto al día anterior. Un empleado atendía la recepción, mientras varios turistas se registraban o subían en busca de sus habitaciones. El hambre, la guio hasta el comedor gracias al aroma a café, y jugo de naranja recién exprimido.
Desde su mesa, junto a la gran ventana, veía los jardines del hotel, ¿Realmente estuvo deambulando allí anoche? Al prestar atención, pudo reconocer a Aizawa, con el cabello amarrado en una coleta baja y ropa deportiva, llevaba gafas de sol oscuras y guantes de jardinería. Kasumi se sorprendió a si misma reteniendo la respiración al ver como se le marcaba la trabajada espalda a través de la camiseta gris de algodón algo transpirada. El hombre estaba recortando unos rosales, mientras dejaba un par de rosas en un canasto junto a él, probablemente para usarlas de decoración en el castillo. Decidida, tomo el ultimo sorbo de café y salió al jardín, para hablar con el mayor.
-Lo de anoche no fue un sueño.-Afirmo, iniciando así la conversación. Él solo se volteo a verla sin prestar demasiada atención a sus palabras.-Tienes un don, igual que Yamada ¿Verdad?-Sonaba irritada. Shota bajo las tijeras de jardinería, mientras otra rosa roja se sumaba a la pequeña pila.-¿No va a responder?-El azabache se quitó los guantes solo mirándole con incredulidad.-Diga algo.
-Primero que nada.-Suspiro acomodando sus gafas tras tomar el canasto con rosas.-Deja de tratarme de usted, ya soy lo suficientemente viejo para que encima me lo andes recordando. Y segundo ¿Qué quieres que diga?¿Qué tienes razón? Ya tu misma lo dijiste, soy inmortal, y te engañe con un don. Fin.-Emprendió rumbo a la construcción, ingresando por la cafetería, mientras ella le pisaba los talones.
-Pero, pero...Se supone que cuando rebelas algo tan importante tiene que ser.-La chica se vio interrumpida por el mayor.
-¿Emocionante?-Dijo mientras repartía las rosas en varios floreros.-¿Quieres que te lleve a un claro en un bosque?¿O que te revele todo después de una fiesta en la que mi hermano malvado casi mata a tu amiga?-La chica abrió la boca para replicar.-No, no tengo hermanos. Tampoco brillamos al sol, ya viste que estaba afuera.-La joven cerro la boca, haciendo un puchero.
-¿Y que hay del don? ¿También manipulas a las personas al mirarles a los ojos y hablarle raro?-Preguntó pisandole los talones nuevamente, mientras dejaba los floreros en diversas mesas.
-Ese es el don especial de Hizashi, es muy diferente al mío.-La tomo del brazo y la guio en busca de una sala vacía donde pudieran hablar sin preocuparse por si se cruzaban a alguien. Su mejor opción fue la biblioteca, que a su vez era su oficina.-Bien, adelante, aquí puedes preguntar lo que sea.
-¿Como funciona tu don?-Lo siguió una vez más, hasta unos sofás individuales de terciopelo negro, donde se ubicaron.
-Mediante el tacto puedo hacer que cualquier persona se duerma y piense que los últimos minutos fueron un sueño.-Le señalo las palmas de sus manos.-Supongo que contigo habría funcionado si no supieras la verdad de Yamada ¿Cómo supiste su secreto?
-¿No se supone que yo hago las preguntas aquí?-Se cruzó de brazos.
-Una pregunta a cambio de otra, es lo más justo.-Se encogió de hombros.-Pero, si no quieres responder esta bien.-Se levanto rumbo al pequeño cuarto de baño que había al fondo.
-Esta bien, esta bien.-Se distrajo observando como se lavaba las manos, y pasaba una toalla secando sudor de su cuello y frente.- Mi mamá fue con él a la universidad, y luego fue su corista. Se volvieron a ver cuando empecé a trabajar para él y empezó a sospechar de que no hubiera envejecido ni un poquito. Somos las únicas mortales que sabemos su secreto según él. ¿Ya pensaste en que te gustaría de fondo para el retrato?
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Besos hambrientos || Aizawa fanfic
FanfictionAunque él estaba atado por la eternidad a sentir el placer del pecado al beber sangre, y el dolor por la perdida de su amada. Un encuentro casual con un aroma familiar le sacudiría el suelo y su estructurada vida de inmortal. ⋅⋅ ──── ⋅ ꧁ ♡ ꧂ ⋅ ────...