My Family Dragon [BL & M-PREG]

CAPITULO 8 (H)

Syfer estaba muy sensible ahora, pero su cuerpo temblaba cuando Herbert lo tomaba de los brazos y le mordía las orejas. Herbert presionó su frente contra su frente, frotó su mejilla contra su mejilla y luego le dio un suave beso en la cara, preguntando en voz baja.

"Syfer, dámelo, ¿De acuerdo? Dame..."

Mientras hablaba, el aliento abrasador permaneció en la nariz de Syfer. El mago no sabía si era por su aliento o por su voz. . Al final, parecía un poco impotente para aceptar su destino, y parecía estar complacido con la indulgencia de Herbert, y levantó los labios para recibir el beso de Herbert.

Emocionado, el dragón negro apretó ferozmente uno de los labios de Syfer, chupó la lengua y los labios de él, como si estuvieran untados con miel, y no podía saborearla lo suficiente.

"Hmm..."

Herbert no soltó sus labios hasta que Syfer estuvo casi sin aliento. Desató el cordón en el cuello del pijama de Syfer, y jaló la ropa hacia abajo a lo largo de los hombros de su amado. El cuello expuesto, la clavícula y el pecho de Syfer el beso.

Donde los labios se frotaban, hubo estallidos de entumecimiento, Syfer gimió suavemente, el olor dulce y seductor en su cuerpo se hizo más fuerte, Herbert olió vigorosamente y finalmente sorbió el pezón de Syfer, chupando, lamiendo y mordiendo vigorosamente.

"Ha ah ... ah ..."

El cuerpo de Sefir tembló, la parte inferior de su cuerpo se había filtrado, salpicando sus pantalones, Herbert lo vio cubrir su rostro sonrojado y se quitó los pantalones, esta vez Syfer todo su cuerpo estaba expuesto ante los ojos de Herbert.

"Syfer es tan hermosa..."

Herbert lamió y mordisqueó el cuerpo de Syfer. El cuerpo que habría estado entumecido con solo un ligero toque fue rozado una y otra vez por la lengua húmeda y caliente, y era aún más suave. No te muevas pronto, el cuerpo de Syfer se empapó de sudor y saliva, sus ojos estaban aún más rojos y húmedos, y todo su cuerpo temblaba ligeramente.

"No... no lamas... eh..."

Herbert luego separó las piernas de Syfer, se lamió los dedos y se deslizó dentro de la cueva secreta. Después de un rato, hasta que Syfer no pudo evitar llamarlo de cualquier forma más extenso.

Cuando la gruesa, caliente y enorme pene de Herbert se apretó contra su cuerpo, Syfer sintió un estruendo en su cabeza, que lo dejó en blanco, resultó que no pudo evitar eyacular nuevamente.

"¿Syfer esta satisfecho con mi enorme pene?"

Herbert bajó la cabeza con aire de suficiencia y lamió la punta de la nariz y los labios de Syfer, mientras su cintura se movía sin prisa.

"Ah... ah..."

Syfer no podía hablar, la sensación que nunca había soportado envolvía todos sus pensamientos, y en este momento solo podía dejarse llevar por el placer. Herbert puso sus manos al lado de Syfer, mientras lo besaba, mientras se controlaba para no perder el control, Dios sabe el momento en el que se enterró, solo quería apresurarse a pesar de todo y dedicarle todo a su Syfer.

Syfer se aferra con fuerza al grueso pecho y la espalda de Herbert, y cuando su parte superior se golpea, su cuerpo sube y baja, el aliento abrasador de Herbert lo envuelve, como una red dulce y suave, tirando de él hacia arriba y hacia abajo. Estaba envuelto en capas, dejándolo ningún lugar para escapar.

"Syfer... mi Syfer..."

Herbert finalmente aumentó lentamente su velocidad, y el gemido de Syfer aumentó repentinamente, haciéndolo aún más desafinado.

"Ah... Herbert... Um... Herbert... yo... yo no puedo... uu..."

La primera relación sexual fue tan larga y prolongada que Syfer sintió que iba a tener sexo borracho, todas las percepciones estaban fuera de control.

Herbert agarró la cintura de Syfer y se movió frenéticamente, Syfer gimió fuertemente, casi gritando, iba a morir, en este sexo.

Cuando Herbert finalmente disparó el fluido caliente, Syfer no pudo evitar soltarlo una vez más y finalmente se desmayó.

Cuando Syfer se despertó de nuevo, todas las marcas pegajosas en su cuerpo habían sido limpiadas y se puso una pijama limpio y cómodo. Herbert lo abrazó por completo, y cuando lo vio abrir los ojos, inmediatamente acercó su rostro. Ven y besa él, luciendo muy nervioso y culpable. (N/T: Tan divino, tan divino)

"Pensé, Syfer... lo hice mal... Syfer..."

"Estoy bien... solo... me desmayé cómodamente..."

Después de que Syfer terminó de hablar, su rostro se sonrojó de vergüenza, y Herbert se rió de inmediato, llevándose el dorso de la mano a la boca para morder.

"¿Te gusta Syfer? ¿Te gusta lo que hago?

El mago se negó a responder. Este chico malo con una mente torcida envuelta en una apariencia inocente era completamente malo.