Una Serie De Microrrelatos

Recuerdos de otra vida

Ahí estaba yo viendo el caos que había ante mi, un revuelo de médicos y enfermeras atendiendo pacientes gravemente heridos, y por la puerta, medio tambaleante apareció un hombre con una brecha importante en la cabeza, aún se sostenia en pie aunque muy levemente, me acerque a él y lo tumbe en una camilla, busque un médico o una enfermera, todos estaban muy ocupados, asique no me quedaba de otra que hacerlo yo misma o el hombre se desangraria y moriría sin ser atendido. Me acerqué a la enfermería y me dispuse a coger todo lo necesario en una bandeja, un puñado de gasas y suero para limpiar la herida pensé, cuando los puse en la bandeja un flashback de imágenes se sucedieron en mi mente y como un autómata seguí ahuja e hilo para la sutura, unos guantes, pinzas , una geringuilla y un bote de lidocaina al 5% sin adrenalina.
Me acerque la hombre con la bandeja llena, me miró "¿eres enfermera?" Me preguntó " "en otra vida lo fui, en esta soy la única posibilidad a tu alcance" y así era recordaba haber echo miles de suturas pero nunca había tocado ahuja e hilo para ese fin. Me puse los guantes y al coger las gasas y el suero me temblaban las manos, ¿sería capaz de lograrlo?, le limpie la herida, era profunda pero fácil de coser, cogí el bote de lidocaína 4mg por kilo era lo correcto o eso recordaba, le pinché a lo largo de la herida, cogí la ahuja y el hilo y me pare ante el, "¿ estas preparado? Hace mucho tiempo que no hago esto, quizás nunca lo he hecho, aún así sigo siendo tu única opción, ¿ estas listo?" La duda se veía en sus ojos, echó una mirada al ajetreo que había alrededor "adelante, me pongo en tus manos señorita".
Empecé con la sutura, cuando quise darme cuenta había acabado con 20 puntos y había cerrado la herida, limpié con un poco más de suero." Espere voy por un par de cosas más " volví a la enfermería cogí yodo y más gasas y una venda, al salir me encontré con un médico "¿ podría venir conmigo?" le pregunte, él me siguió al ver mi cara de preocupación" hay un hombre con una brecha en la cabeza, se la he cosido, pero no se si el está bien, con un golpe como para semejante brecha" el médico observo mi trabajo " lo ha echo bien" me dijo y le hizo una exploración rutinaria.
"Esta bien no parece tener nada grave, ahora acabe su trabajo y dejele descansar" le eché yodo con mucho cuidado le puse unas gasas y lo vendé ya estaba listo. " me alegro que fueras enfermera en otra vida, gracias" dijo el hombre cerrando los ojos. Cogí la bandeja de nuevo con todo ensangrentado, nunca había hecho nada parecido en mi vida y aún así recuerdo haberlo echo miles de veces, posiblemente había salvado una vida gracias a recuerdos que yo no sabía que poseía.