Sangre del Dragon-- House of the dragon

Capitulo 1

Alli se encontraba Daemon, incrédulo, otra vez, de lo que veía, en el cielos se encontraba Alyssa sobre un dragón plateado, pero eso no era lo que lo dejo sin palabras, sino el tamaño de la bestia, nunca había visto un ejemplar tan grande desde Balerion, no podía creer que su supuesta hija, la cual tiene solo cinco y hasta un perro de caza es más grande que ella, se encuentre sobre ese animal volador como si nada.

―Aterriza Belaerys―le dijo en alto valyrio la castaña.

Su dragona cumplió con la orden rápidamente, descendiendo muy cerca de donde le padre de la niña de encontraba junto al dragón de este.

―Así que―comenzó el mayor―aparte de montar a un dragón tan grande como el terror negro, también hablas valyrio ¿Cómo es que saliste de alguien como Rhea Royce?

―La verdadera pregunta aquí es―menciono de forma indiferente mientras se quitaba los guantes― ¿Cómo es que yo, tenga la sangre de alguien tan idiota como tu, corriendo por mis preciadas venas?

―Eres digna hija de tu madre―rio burlonamente.

―Sí, eso ya lo sé―obvio a la par que se daba vuelta para enfrentarse a su padre―lo único que podría dudar es tu paternidad, si no fuera por mis ojos, ―comenzó a adentrarse a la fortaleza seguida del hombre―y bueno, algunos dicen que mi carácter también se asemeja al tuyo, pero claramente están todos equivocados―pronuncio, segura de lo que decía.

―Y se puede saber ¿Por qué?―indago Daemon.

―Porque, claramente, ―dramatizo― yo soy una dulzura, todos me aman y me respetan como futura señora de Runestone―freno su caminata para ver nuevamente a los ojos de su padre, tan parecidos a los suyos―en cambio tú, eres arrogante y no te importa nadie más que ti mismo y tu bienestar y deseos. Eso lo has demostrado muy bien al matar a mi madre solo por un capricho―aseguro de forma resentida y una mirada seria―Oh, y tú no tienes un tierra que heredar―le dio una sonrisa socarrona.

―Respétame niña, soy tu padre―exigió firmemente, la pequeña solo giro los ojos mientras soltaba un bufido, para luego darse la vuelta y seguir su camino hacia su habitación.

―No me lo recuerdes.

(...)

― ¡Auch!

Resonó en un pasillo desierto―si no fuera por el par de niños que acababan de chocar― de la fortaleza roja.

―Fíjate por donde caminas niña tonta―refunfuño el niño peliblanco― ¿Qué no sabes quién soy?

― ¿Un niño petulante e idiota? Si, ya lo vi―ironizo.

―Cuida tus palabras, bonita―advirtió mientras se acercaba a ella, tratando de lucir amenazante, aunque le resultaba difícil esconder su sonrisa burlona, la cual era generada por la gracia y ¿ternura? Que le daba la niña, ya que esta tenía sus mejillas rojas del enojo y su ceño estaba fruncido.

―Acércate más y de mis palabras es de lo último que te tendrás que preocupar, estúpido niño―dijo firmemente, con sus violáceos ojos brillando de la furia.

El mayor, presente en el pasillo, soltó una risilla;

― ¿Y que podría hacerme una cosa tan pequeña como tú? ¿Patearme el tobillo?―se burló.

―Quizás un poco más arriba―aseguro con una sonrisa amenazante―o, podría hacer que mi dragón te busque en la noche y te coma vivo.

―Tú no tienes un dragón―hablo seguro―para eso tendrías que ser parte de mi familia.

― ¿Hablas de los Targaryen?

―Si―afirmo parándose derecho―Soy Aegon Targaryen, príncipe de la casa del dragón.

― ¿Ah sí?―fingió impresionarse, inflado el ego del chico por unos segundos― Pues yo soy Alyssa Targaryen, heredera de Runestone. Oh, y princesa también entra en mis títulos.

El niño se quedó sin palabras, ya que no esperaba que esa niña sea un pariente suyo, pero;

―¿De quién eres hija?

―Lady Rhea Royce era mi madre―dijo con orgullo―y mi padre es Daemon Targaryen, para mi desgracia.

―Wow, nunca supe que Daemon tenía una hija.

―Sí, bueno, sorpresa―ironizo de forma aburrida―igual él tampoco sabía. Como sea, me voy, ya me aburriste.

Dicho esto se retiró hacía, finalmente, sus aposentos, donde se acostó en su cómoda cama para, rápidamente dormirse, ya que estuvo volando toda la mañana con Belaerys y eso la dejo agotada.

Por otro lado, Aegon se encontraba en el mismo pasillo, en el que la princesa lo abandono, pensando en ella y su carácter tan llamativo, obviando su belleza natural y tan inocente.

El joven príncipe, de apenas seis días del nombre, no lo sabía en ese momento, pero esa pequeña traería muchas cosas nuevas a su vida.

Bueno, este es mi primer fanfic de House of the dragon, y como se sabe es un universo bastante complejo, así que pido disculpas si me equivoco en algún tema ya que soy nueva es este fandom.

De igual manera algunos acontecimientos, probablemente, no sigan la trama de la serie y/o libro.

Ténganme paciencia...