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꒷꒦ Narrado por Liu.  ꒦꒷
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                                      ( ംംം )

He estado tan perdido en mis propios pensamientos en estos últimos años de mi vida, que me había olvidado del lugar donde fui feliz una vez.

Mi hogar...
Estuve tanto tiempo caminando a altas horas de la noche, buscando calma que parece que ya no tengo noción del mismo tiempo.

Pasaron muchos años, demasiados, desde que estuve por estos lares, que se me es casi imposible recordar el camino,
para colmo mi memoria no es tan buena que digamos.
No fue hasta que vi una columna de concreto, con una casita de pájaro al lado, que por fin pude orientarme, y terminar en nuestro antiguo barrio.
Donde emprendería mi camino hasta mi antiguo hogar.

Que ahora... no es más que un lugar opaco, gris, con vegetación creciendo y tomando el mayor espacio de las paredes que puede, con moho, y un aire de mala muerte que en épocas mejores, alguna vez fue, mi lugar feliz.

Todo es culpa de él...  Jeffrey.
Todos éramos felices antes de que ese maniático perdiera la cabeza, pero no tengo que hacerme el idiota, papá, mamá e incluso yo...
Ayudamos a ese enfermo mental a deshacerse de los cuerpos de sus primeras víctimas.

Todos creímos en sus mentiras, creímos que podríamos cambiarlo y volver al buen camino.
Creímos que... todo podía volver a ser normal.

Mamá era ingenua, nunca se percató que su adorado Jeffrey nunca volvería de nuevo,...
no importa que tantas pastillas y terapias tenga
ÉL JAMÁS VA A VOLVER, MAMÁ.
JEFFREY MURIÓ, MAMÁ.

...

Papá fomentaba la ingenuidad de mamá, solo guardaba silencio y no decía nada cuando Mamá se encargaba de lavar la ropa ensangrentada del mocoso de mierda que tengo por hermano.

Nunca me atreví a llevarles la contraria, solo bajaba la mirada y obedecía cuando mamá decía que debía deshacerme de... esos cadáveres.
Justificaba que Jeff estaba enfermo, que con paciencia y amor, podría curarse...

La escuché llorar... muchas veces.

Indudablemente, eras el favorito de mamá Jeff, y eso, fue la causa de su muerte.

Sigo sin entender... ¿Por qué ella? La mujer que más te amo, te protegió y te cumplió todos tus putos caprichos,
¿Como pudiste... si quiera mirarla a los ojos mientras veías como su vida, la vida que daba por ti, se iba de sus ojos? Por tu propia mano.

Quizás papá no era mucho para ti, Jeff, pero... mamá.
Mamá era todo, y cada noche deseo volver al pasado, no para salvarte a ti, sino para salvarla a ella...

Te odio, JEFF.
Odio lo que nos hiciste, odio que no pudieras ser normal, odio que mataras a mamá, pero...
más me odio a mi.
Por no haber visto las señales antes, por no haber hecho NADA cuando venías todo ensangrentado a casa,
por...
No haber salido de la cama cuando escuché como matabas a nuestros padres a sangre fría.
Me odio mucho, por haber sido tan cobarde.

Solo eres un mocoso malcriado Jeff,
un puto mocoso malcriado que quiero asesinar.

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                     ംംം

Mis pisadas sonaban con eco por toda la casa, la puerta estaba sellada, así que entré por una ventana, no es lo más ético, pero tampoco es algo muy grave.
El olor a humedad y a naturaleza me sofoca las fosas nasales.
Pero prefiero eso, a oler el olor a muerte que traía Jeff a casa.

Con mi vista recorro cada mínimo detalle del abandonado lugar, o lo que llego a ver, la luz de la calle entrando por dos o tres ventanas locas no es muy iluminadora que digamos, pegando suspiros nostálgicos al recordar las buenas cosas.

Pero la rabia me consume, no creo poder estar tranquilo en este lugar, por más nostálgico y melancólico que esté, mi odio nace del fondo de mis entrañas.
Quizás, debería irme...

* crack *

¿ ? ...
¿Qué fue ese sonido?

Agudicé mi escucha, quedándome sin respirar por un momento, prestándole atención a los ruidos que parecían venir... de mi habitación.
¿Se habrá metido un vagabundo?

La curiosidad me pudo, y sigilosamente empecé a acercarme a mi cuarto, guiándome con un mapa mental de la casa, hasta que logré encontrar la puerta.
Estaba semi abierta, pero eso no fue lo que me hizo darme cuenta que había alguien dentro.

A unos pocos metros del cuarto, se escuchaban unos gemidos y jadeos muy gozantes diría yo.

Lo cual, me hace preguntarme,
¿Quién en su puto sano juicio vendría a este lugar a tener sexo?
Pero parecía estar disfrutándolo mucho.

Creo que no le voy a tomar importancia, la gente rara abunda en este mundo.

Me aparté, con claras intenciones de irme... pero...

L... Liu...

Quedé totalmente paralizado, mis piernas no podían moverse por más que yo quisiera, lo único que pude escuchar después de mi nombre, fueron los latidos de mi corazón retumbando con fuerza en mis tímpanos.

¿Quién mierda era... esa persona?
Mis ojos verdosos lentamente fueron dirigiéndose hasta la apertura que dejaba ver un poco del interior del cuarto.

Con una luz tenue, mi cuerpo me PEDÍA que viera por allí.
Y sí... lo hice.

Solo para obviamente, no ver nada.
No tengo intenciones de quedarme viendo a este lunático enfermo, pero si es verdad que me da curiosidad saber quién es tan capaz de hacer ese tipo de cosas en este lugar... y encima saber mi nombre.

Y por eso... creo que no voy a tener otra alternativa más que asomarme un poco más.

Fue lo que hice, pegué mi cabeza a la puerta, adentrándome lentamente con sigilo, la habitación iba haciéndose más vistosa mediante abría la puerta.
Pero tampoco me la jugué demasiado.

Ahora sí, la luna que entraba por la única ventana del cuarto, iluminaba una silueta en movimiento... y cuando me percaté, ...
deseé tanto nunca haberla visto en primer lugar...  .

𝐌𝐔𝐑𝐃𝐄𝐑𝐄𝐑𝐒 ം 🔪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora