CAP 4 🔴

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Había pasado tiempo desde que estuve con la enfermera, me encontraba sola en mi habitación, Jade estaba ocupada, debo acostumbrarme si voy a quedarme un tiempo, no creo que un alfa deje ir a su presa tan fácil, si estuviera en mi casa, estaba segura que un día como estos, estaría echada en mi cama, quizás viendo una serie, o dibujando en la tranquilidad de mi cuarto, me hacia feliz estar en mi cueva, donde nadie me molestaba, sin tener que seguir reglas, sin matrimonios arreglados, cada vez recordaba del por que me aleje de este mundo.

Después de estar acostada sin hacer nada, me levante para salir al balcón, quería un poco de aire, un ligero viento revoloteo mi cabello, cuando abrí las puertas, di unos pasos más, repose mis brazos en la barra de cemento, el balcón era grande, tanto así que había un sofá afuera, me sentía como una princesa, mire el cielo, vi unas aves volar, envidie su libertad, ellas podían hacer lo que querían.

En mi caso debía obedecer a un alfa que me rescato, mi padre siempre me advirtió que me cuidara en todo momento, sobretodo de los alfas, me contaba tantas historias cuando era niña, me provoco un trauma, cada vez que veía a un alfa corría y me escondía, mi padre llego un punto en que contrato algunos guardaespaldas de confianza para mi protección, claro que, me oculto por mucho tiempo que eran alfas, para que no me sugestionara y pensara que me harían daño, afortunadamente los alfas que estuvieron a mi cargo, eran unos caballeros, de esos hombres que son difíciles de encontrar hoy en día, siempre me protegían, habia veces que cambiaba de guardaespaldas, de mas grande entendi que eran por su etapa de celo, al bajar la mirada vi a Jade hablar con su hermana.

Parecían conversar sobre algún asunto importante, la verdad me causaba intriga de lo que hablaban, no suelo ser chismosa, pero, esta vez quería saber de qué discutían. Jade era más alta que su hermana, cuyo nombre jamás pregunte, mire fijamente aquella mujer peli negra, era muy guapa, además tenia buenos atributos, parecía que se ejercitaba, me gustaba su cabello largo y negro.

Fije la mirada en ella por un rato, apreciaba cada aspecto fisico, lo admito, era un poco mi tipo, llego un punto en que nuestras ojos se cruzaron, un escalofríos que recorrió por mi cuerpo, de algún modo quise seguir teniendo el contacto visual, peleábamos por quien se intimidaba más, mi padre me enseño a como dominar un alfa con la mirada, si un omega tiene miedo es una presa fácil, quería demostrar que era no era una omega cualquiera, mordí mi labio, ojalá supiera su nombre, cada vez nuestra tensión que teniamos amuentaba, tanto así que Jade me atrapó observando a su hermana, tenia un mal  presentimiento, puedo comprender su enfado,  y no la culpo, estaba coqueteando con su hermana.

Desvíe la mirada pensando en lo que acabo de hacer, me sentí mal por Jade, ya que ella me había salvado de mi ex pareja, seguro pensara que soy una cualquiera, maldición, espere unos segundos para poder mirar abajo, sabia que ya no estarían ahi, ahora si lo arruine, como no conozco a Jade no tenia idea que me esperaría.

Con la inquietud y la ansiedad que recorrían todo mi cuerpo, me fue imposible mantenerme quieta, di un brinco cuando escuche que alguien abrió la puerta de golpe, era Jade, camino hacia mi con pasos rapidos, comencé a retroceder, cuando un alfa estaba enojado  era imposible controlarlo, choque con la pared, había menos de un metro de distancia, estaba muy cerca, en sus ojos veía celos.

-¿Así es como me pagas? -. Comento seria.

Comencé a ponerme nerviosa, no sabia que decir.

-Te salve de ese animal, te atendi, para que al final...¿Termines coqueteando con mi hermana? -. Dijo enojada.

No podía verla a los ojos, sabia que hice mal, a pesar que su hermana me genera desconfianza sentí cierta tensión entre nosotras, solo me deje llevar por la situación.

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