𝘉𝘰𝘺𝘧𝘳𝘪𝘦𝘯𝘥

𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 2 🍁

Jack:

¡Vamos equipo! -resonó al unísono.

No puedo creer que esté haciendo esto, llevo media hora sentado en unas gradas super incomodas, no sentía el trasero de lo entumecido que estaba, mis oídos se habían tapado debido al ruido intenso y chilloso de las chicas al gritar, además del infernal calor que hacía.

Realmente esperaba que todo ese martirio valiera la pena porque aún faltaba media hora y el tipo que le gusta a Sam al parecer está en la banca desde que comenzó el juego, pronto será medio tiempo y ejecutaría el plan, rezaba porque funcionara.

La chica rubia a mi lado se levantó sin decir nada en cuanto el silbato sonó, lista para bajar corriendo e ir a entregarle una botella de agua a su amigo, de paso saludar a Aron si es que esta vez la nota. Yo no me moleste en levantarme, de seguro no sentiría el trasero, mejor los veía de lejos, así lo disfrutaba más.

Dicho y echo de lejos podía ver todo lo que sucedía, veía como Sam le aventó la botella de agua a su amigo sin interés  y discretamente volteó a ver a Aron quien lucia bastante relajado para ir perdiendo y estar en la banca sin poder ayudar a su equipo, incluso parecía disfrutarlo, con ambos brazos en la nuca recargado en su asiento. Soltó un suspiro pesado cuando cruzó la mirada con mi hermana.

¿Eso qué significaba?

Sam sonrió levemente sin asustarlo, no como de costumbre, suele parecer una acosadora  y lo termina espantando, este le responde de igual forma con una sonrisa, sin embargo se notaba... forzada.

Veo como Sam se acerca a él, pero al momento en el que intenta hablarle se queda con la palabra en la boca, ya que Aron se levanta de la banca, toma su termo y le da un trago, se voltea notablemente evitándola, de un momento a otro llega a mi lugar con la mirada, lo que provoca un escalofrío extraño; ¿Miedo? ¿A que?

Solo sabia que Aron no paraba de mirarme, mientras sostenía el termo pretendiendo beber agua, vi como Sam se cansó de esperar y se fue al lado Mike, en cuanto bajó el termo negro una sonrisa se formó, dirigida a donde yo me encontraba, como instinto me obligue a evitarlo volteando a otro lado, suerte que Sam no se percató de lo sucedido.

Escuche el silbato sonar nuevamente, comenzaba el segundo tiempo y Sam llega enfurecida, roja de rabia, no conmigo, tal vez con él.

-¿Qué pasó? -pregunto incrédulo.

-Ni siquiera te atrevas a preguntar -amenaza rechinando los dientes, sin siquiera sentarse toma su bolso negro con arrebato-. Me voy, todos aquí son unos inútiles y este partido es una mierda -repudia bajando de las gradas con pasos firmes.

-Espera, voy contigo -no tenía a dónde más ir y no quería quedarme solo. Eche un último vistazo al campo, en especial las bancas en donde se encontraba el, igual de tranquilo que al inicio, sonrio estúpidamente y continuó tras ella.