ᴄʜᴀɴɢᴇs

6

— ¡Omori! Estas bien?

— creo que murió.. – dijo una voz   infantil masculina.

— chicos denle espacio, esta despertando.– habló otra voz masculina infantil.

Omori despertó confundido y vio a sus amigos rodeandolo en un círculo.

— ¿he? ¿Qué pasó? – preguntó Omori.

— Derrepente te desmayaste, estábamos preocupados y- –Aubrey fue interrumpida por un grito que se escuchaba detrás de ellos.

— ¡OMORI! – era Mari corriendo donde estaban ellos, se veía demasiado preocupada y detrás estaba Hero quien la seguía. Mari se percató que estaba despierto y  ahí se calmo un poco. — Por dios ¿estas bien? ¿Te sientes mal? – dijo Mari tomando a Omori preocupada y examinaba si no estaba con alguna herida o enfermo.

— Si estoy bien, pero ¿que paso? – preguntó Omori

— Pues te desmayaste y de ahí estuviste así como por 10 minutos. – respondió Aubrey quién estaba al lado del chico pelinegro.

— No recuerdas porque fue? – preguntó Mari todavía preocupada.

— No la verdad, sólo se vio todo negro y ahí.. Nada más.

— bueno. Por lo menos estas bien, pero te sientes bien no tienes fiebre o algo – Mari seguía muy preocupada por su hermano.

— No lo sé la verdad. – dijo poco expresivo.

Mari tocó a Omori por toda la cara para ver si no se sentía mal o estaba enfermo, después de verificar que su hermano menor no estuviera mal se levantó y ayudó a levantar a Omori y le dijo a los demás niños que la siguieran para así recojer las cosas del picnic y acompañarlos por si algo les pasaba.

Después de que todos ayudarán a recojer, emprendieron un paseo para que Basil encontrará más flores extrañas y así fotografiarlas, pasaron la tarde paseando hasta que encontraron una cueva Basil noto que se vei un poco iluminada cosa que se acercó un poco más separándose un poco del grupo y lo que alcanzó a ver fueron una flores que el busco por mucho tiempo este detuvo a sus amigos y les dijo que entrarán, por un momento ambos chicos mayores dudaron un poco pero al ver el entusiasmo de Basil entraron pero con precaucion, al entrar se encontráron con la sorpresa de que toda la curva estaba iluminada con esas flores tan hermosas, Basil estaba más que emocionado pues profin había encontrado esas flores.

— Wow es hermoso, ¿no crees Omori? –  preguntó Basil a su amigo.

— Realmente es muy hermoso – Omori estaba realmente impresionado por lo que estaba viendo.

— La verdad nunca creí que las encontraria pensaba que sólo eran un mito, dicen que cada cierto tiempo cambian de colores y más si con música, pero no creo que eso sea real. – Basil se encontraba un poco escéptico de ese rumor de aquellas flores.

— y si lo intentamos? – dijo Omori motivando a Basil para que lo haga.

— Pero Omori no tenemos instrumentos.

— Ouh verdad, mejor intenmoslo   otro día, traigo mi violin y así veremos si es real.

— Tienes razón.

Después de estar un rato todos se fueron de la cueva y siguieron paseando y pasándola bien,Omori se sentía raro, sentía que no pertenics de algún modo ahí pero se sentía tan cómodo que quería estar para toda la vida ahí.