Un regalo de Dios ૮₍'˶• . • ⑅ ₎ა

46 4 0
                                    

Estaba con Vegetta, Rubius y Willy hablando sobre los dioses, nunca los habíamos visto ni interactuado con ellos sin que haya sido alguna pelea. Estábamos en una azotea de un lugar abandonado demasiado algo.

— ¡Jaja! ¿Que pasa si me tiro?— dijo Willy asomándose

— que te mueres— dije serio con una pequeña sonrisa.

— ¿pero tú estás bobo? ¡Como te vas a tirar!— dijo Vegetta poniéndose la mano en la cara.

— te dos 2 diamantes si te tiras y no mueres— dijo Rubius.

— ¿¡2 diamantes!? 4 o nada— dijo Willy sonriendo.

— te vas a morir— dije otra vez apoyándome contra la pared mirando el cielo.

— ¡por fin alguien que piensa como yo! ¡Gracias Luzu!— dijo Vegetta mirando fijamente enfadado a Rubius.

— ¡bueno bueno, no te enfades conmigo triple siete!— dijo Rubius quejándose.

Nos sentamos a y empezamos a jugar a verdad o reto.

— Luzu ¿verdad o reto?— dijo Vegetta.

— Reto— dije yo.

— ¡te reto a chupar el marco de la puerta!— dijo Willy riendo.

— hijo de puta— me acerque al marco de la puerta para luego tragar saliva y lamer el marco de la puerta.— ¡QUE ASCO!— dije escupiendo.

Todos empezaron a reír menos yo que tarde unos 30 segundos.

— ¿oye pensáis que habrán más dimensiones?— dijo Rubius tumbándose en el suelo.

— nah, ¿como va a ver otra?— dijo Willy.

— no tenemos pruebas de que no hayan— dijo Vegetta curioso.

— ni de que si hayan— dije mirando para el cielo algo confundido.

Hubo un silencio algo incómodo.

— ¿que nos había pedido Lolito?— pregunto Willy.

— ummh... si mal no recuerdo un libro... unas semillas... hierba...— Vegetta se puso a pensar en lo ultimo.

Mientras vegetta pensaba me cayo una pluma y la mire con curiosidad.

— una pluma..— dije medio susurrando.

— ¡si eso! ¡Una pluma!— dijo Vegetta sonriendo.

— no no, una pluma mirar— dije enseñando la pluma.

Todos se acercaron a ver la pluma y la miraron con curiosidad.

"Parece de pato" decía Rubius "Debe ser una pluma normal" decía Vegetta "mejor dársela a Lolito" decía Willy.

— parece de un ángel— dije yo y todos me miraron.

— puede ser que..— algo interrumpió a Vegetta.

Había algo que estaba cayendo del suelo y al ser de noche de vería como ropa algo blanca que parecían más bien vendas y a la vez ropa. Corriendo bajamos a ver que era y ahí se encontraba un chico... un chico de alas doradas con rasguños y sangre por el cuerpo... un chico... un chico... un chico hermoso que parecía un ángel... un principe ángel...

Mi Querido Ángel Caído...- LuckityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora