SEGURIDAD (Billie Eilish y Tú)

#1

-Esto es enserió Billie, necesitamos contratar seguridad- dijo mi mamá entrando de tras de mí a mi camerino.

-Puse la demanda mamá, le dieron orden de alejamiento- dije ya harta de la conversación, me senté en el sofá de la esquina. Había dado un show de tres horas, lo menos que quería era tener esta conversación.

-Enserió, crees qué una hoja de papel va a evitar que se acerque a ti Billie?- intervino Finneas, que se estaba secando el sudor de la cara con una toalla.

-tiene que hacerlo, no quiero verme cómo una superestrella- haciendo énfasis en la palabra- No lo soy, eso de tener cuatro hombres rodeándome hmm... No me gusta, no es para mí.-finalice-

-no es algo que se pueda discutir Billie-dijo mamá poniéndose frente a mí. No me voy arriesgar, tendremos una cita con los hermanos Lennox

Me puse de pie alterada -Debes estar jugando, puedo aceptar cualquier otro personal de seguridad. Pero no a esos «hermanitos»-

-No vamos a discutir Billie, mañana tenemos la cita a las 9:00 am y se acabó.- Dijo mi padre quien estaba recargado en el marco de la puerta

Viendo que mis posibilidades de ganar en esta pequeña discusión eran nulas, decidí sentarme y calmarme.

Finneas se sentó a mi lado -Aún que no te guste admitirlo, sabes que son la mejor opción si queremos seguridad- dijo acariciando mi espalda

¿Quieren saber quiénes son estos hermanuchos?, Pues les voy a contar lo que sé. Los Lennox son una especie de compañía de hermanos, se encargan de la seguridad de figuras públicas como presidentes, cantantes, empresarios, etc.

Lo que los hace diferentes de cualquier Guarda espaldas, es que ellos podían estar las 24 horas contigo hasta el punto de ser tus vecinos para poder cuidarte.

Que ellos si ponían la vida de sus clientes sobre la suya.

~Ellos están enfermos~

-Bien, pero van a haber condiciones- antes de que alguien dijera algo más proseguí- Muero de hambre, vayamos a cenar algo por favor.

Todos coincidieron conmigo y sin más fuimos a Taco Bell.

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Después de haber comido, finneas y Claudia decidieron ir a su casa, yo estaba lejos de la mía, entonces me quede con mis papás.

Mala idea.

Estaba mirando The Office en la sala, cuando mamá entró y decidió sacar el tema de la seguridad de nuevo.

-Tu integridad no es un juego Billie, me preocupó por ti- dijo sentándose en el sillón conmigo.

Pause la serie y conteste.

-Mamá no me tomó esto a juego solo, no quiero que alguien piense que he perdido el suelo, no quiero leer artículos en donde hagan ese tipo de comentarios- dije frustrada

-Estás diciendo que es más importante lo que digan que tu vida?- dijo incrédula

-Mamá no es eso, no quiero tener a alguien monitoreándome las 24 horas del día como si fuera un bebé, solo pido eso.

-Lo del tiempo lo veremos mañana, ahora ve a dormir que la cita es temprano y no quiero que vayas desvelada

-Bieeen- dije arrastrando la palabra. Tome el control remoto, Apague la televisión y me dirigí a mi habitación, no sin antes desearle buenas noches a mi mamá.

Mi habitación. Me quedé un rato en la puerta detallando cada rincón en la obscuridad, prendí las luces, led Rojo. Amo ese color, pienso que es algo misterioso y jodidamente sexy.