¡Hola!.
Todavía tengo ciertas dudas de cómo llevar a cabo este fic 🗿🤙.
Antes que nada, ya saben si me equivoco corrígeme a putasos.
Perdónenme por las faltas de ortografía y gramaticales ya saben que estoy pendejo por no estudiar español.
Sin más pendejada empecemos.
Fue entonces que vago por semanas, tal vez estaba débil físicamente, muerto en vida para ser precisos, fue su fuerza de voluntad que lo mantuvo vivo, se negó a morir más en su situación actual donde permanecía sin conocimiento en este nuevo mundo, el cual, como si la vida quisiera jugarle una broma, las naciones estaban en guerra, fue una suposición al no entender esta nueva lengua, aún conservaba sus ropas rasgadas y cada vez que huyendo más como un perro faldero, no solo había sido eso, Naruto no había perdido el tiempo vagando por lugares para admirar su belleza, no, él había investigado alguna forma de volver a su verdadero hogar, y sin embargo, lo único que obtuvo fueron respuestas sin sentido, tal vez no entendía la lengua pero todavía era lo suficientemente listo para averiguar un poco y solo encontró. Nada.
Fue por eso mismo que exploro otros lugares para más conocimiento y hasta donde sabia, el lugar donde permanecía era, Liyue, tierra de montañas.
Entonces, una ligera brisa con una fragancia familiar sobrevoló hasta el, una fragancia que Naruto reconoció de inmediato, el olor a sangre y muerte, un olor que no quiso volverlo a sentir, su cara se arrugo al sentir aquellas muertes aferrarse al aire, de ninguna manera un humano podía verlos o sentirlos, de ninguna manera tangible que un humano lo detectaría, de hecho, la muerte aferrada era parte de este plano de realidad a ella, intrínseco a ella, este solo podía significar que el futuro de este mundo ya estaba manchado de oscuridad y destinado a los horrores.
Miro a los momentos de mayor importancia en este mundo y aprendió todo lo que necesitaba, fue entonces que sus pensamientos fueron detenidos cuando observo a un hombre, un hombre que lo miraba fijamente, a Naruto le recordó extrañamente a un Kage, no solo por su presencia sino por su mirada.
Entonces, varias lanzas se incrustaron donde Naruto estaba parado.
"¿Un nuevo Arconte?, Barbatos murió por mis manos". El hombre suspiro mientras descendía lentamente al suelo.
Naruto frunció el ceño, instintivamente su única mano se movió hacia atrás, fue entonces que a una velocidad impropia para un ser humano Naruto mando a volar al hombre, el golpe tomo por sorpresa al hombre, que al igual que el rubio preparo su siguiente ataque.
Fue en ese momento donde Naruto fue tomado por sorpresa, lanzas hechas de piedra salieron del suelo para tratar de apuñalarlo, si fuera cualquier otra persona por sus reflejos ahora mismo estaría tirado en el suelo con diversos agujeros en su cuerpo, pero Naruto no era cualquier otra persona, el hombre dio un paso vacilante mientras observaba la escena, no paso mucho tiempo para que la fría bruma que empalagaba el aire con un sabor salado irritara sus ojos.
Ese momento fue aprovechado por aquel hombre, el hombre con una lanza atravesó el pecho del rubio, Naruto se estremeció cuando la lanza perforaba sus órganos al moverse en forma de espiral.
"Lo dije una vez y lo diré por última vez, cualquier arconte que invada mi territorio tendrá que enfrentar a Rex Lapis". Termino de hablar mientras sacaba la lanza del pecho de Naruto de una forma poco ortodoxa.
Se dio media vuelta y camino tranquilamente mientras miraba aquel horizonte donde estaba terrible guerra, sus pasos se hicieron más lentos por segundo, hasta que finalmente, freno, contemplo el horizonte no observo la guerra, tampoco la amplia devastación. Rex lapis observo algo mucho más temible, blasfemo, algo fuera de su compresión, era grotescamente malsano, era indescriptiblemente antiguo que se remontaba al comienzo de la tierra o incluso podía ser anterior por completo, Rex Lapis se congelo cuando una brisa golpeo su rostro se estremeció como nunca antes lo había hecho, por primera vez en su larga vida pudo sentir lo que los humanos temían a la muerte, miedo, por simple instinto, giro su cuerpo.
