Descubriendo tu verdad

-"Casi listos"-

Recapitulando....

- ¿Hay... Algo que quieras decirme?- pregunta al notar mi seriedad.

Abro la boca, pero mi garganta está demasiado seca como para decir algo.

Sus ojos cristalizados y enrojecidos mirandome solo hacen que me sienta peor por mentirle en primer lugar.

- Sí... Yo....- Me fuerzo a hablar....

Ella levanta una de sus cejas mientras me mira confusa.

- Yo....- Me aclaro la garganta antes de continuar- Solo quería saber si aún está en pie nuestra cita de hoy.

- ¡Oh!- Ella suelta una risita- ¡Claro! ¡No veo la hora de salir contigo!- Dice entusiasmada.

Sonrío de lado ante eso, ella es realmente adorable cuando se lo propone.

- ¡Bien!, Entonces te dejo para que te prepares- Respondo, a punto de salir de nuevo.

- ¡E-Espera! ¿A dónde vamos?- Pregunta, parece nerviosa.

- ¿Por qué? ¿Tienes miedo de que te secuestre?- Bromeo para aligerar el ambiente.

- ¡Ojalá!- Me sigue el juego- E-Es solo que... Tú debes estar acostumbrado a lugares "elegantes" por decir lo menos, pero yo.... Nunca he encajado bien en ellos...- Susurra lo último en un tono avergonzado mientras desvía la mirada y sus mejillas se prenden en rojo.

- Es un sitio elegante- Admito, a lo que ella parece aún más incómoda mientras se retuerce un poco en su lugar- Pero estás muy equivocada si crees que me importa una mierda lo que esas personas opinen de nosotros- Ella levanta la vista, asombrada de mi declaración- Cielo...- Susurro acercándome a ella y poniéndome de cuclillas para estar a su altura- La única opinión que me importa es la tuya, las personas siempre encontrarán algo con que recriminarte, el truco es no dejar que te afecte- Aseguro con una sonrisa mientras observo sus ojos iluminarse- Pase lo que pase hoy... Lo que siento por ti es real... Te amo... Ninguna estúpida cena va a cambiar eso.

Sus ojos se cristalizan de nuevo, su mirada se suaviza y podría jurar que puedo ver todo un mar de emociones detrás de ellos.

- P-Pero yo....- Murmura en tono bajo.

- Linda, el único con derecho a decidir a quien amo soy yo, y he elegido amarte.... Siempre podrás elegirme o elegir a alguien más, pero por mi parte, ya tomé mi decisión, y te elijo a ti.... SIEMPRE.... Voy a elegirte a ti.

Sus ojos no lo soportan más y las lágrimas caen por sus mejillas como pequeños riachuelos, haciendo que su maquillaje se derramé por doquier.

- Mierda, lo siento... Seguro me veo horrible ahora....- Susurra mientras intenta secar sus lágrimas y limpiar su maquillaje, pero es inútil.

Tomo de sus muñecas para detenerla y le brindo una sonrisa sincera, tal vez la primera en un largo tiempo.

- Mi amor... No me importa si llevas o no maquillaje, si tú rímel está perfecto o si está hecho asco... Siempre has sido y siempre serás la mujer más hermosa del mundo para mí...- Susurro, acercando su rostro al mío y dejando un casto beso sobre su frente.

Ella solloza suavemente y se abalanza sobre mí con un abrazo. Por un momento casi pierdo el equilibrio, pero me las arreglo para devolver el abrazo e inhalar el dulce aroma a frutos rojos de su shampoo.

- Te amo....- Susurra con la voz quebrada- Siempre lo he hecho.... Y siempre lo haré....

***

Continuamos el abrazo por unos minutos antes de separarnos con lentitud.