Secret Kisses | VMin

2.

Los días habían pasado, específicamente una semana. Jimin podía sentir como en su relación con SeungHo se iba formando un vacío conforme iban pasando más días.
Desde el día en que alejó a Taehyung, como él lo mencionó, no había dejado de pensar en él, cada beso, cada caricia, cada sonrisa dedicada de SeungHo le recordaba amargamente a Taehyung.

Se sentía cada vez peor, pues no sólo dejó de lado su aventura con Taehyung, si no su preciada amistad. Y antes de que todo se fuera a la mierda, eran inseparables, Jimin amaba llamarlo como; su alma gemela.

Al principio creyó que sólo extrañaría su amistad, pero conforme iba pasando el tiempo, el recuerdo de sus besos lo atacaba durante el día, la sensación de sus brazos rodeando su cintura y todas las dulces palabras susurradas al oído lo hacían sentir anhelante.

La culpabilidad de pensar en Taehyung mientras estaba con SeungHo se fue a la basura, ya no le importaba nada más que volver a tener al pelinegro en sus brazos.

ㅡ¿Minnie? ¿Me estás escuchando? ㅡLa suave voz de SeungHo lo sacó de sus pensamientos de golpe.

ㅡUm, perdona, ¿qué decías? ㅡEl suspiro cansado de su novio lo alertó.

ㅡNo importa, debo irme, me surgió un compromiso con un amigo ¿Te veo otro día?

Jimin asintió para después despedirlo con un suave beso en la mejilla.

SeungHo salió del restaurante y él no pudo hacer más que sacar su teléfono mientras esperaba la cuenta.

Se sentía un poco mal por estar haciéndole perder tiempo a SeungHo al estar con él y no poner interés alguno en su relación, probablemente debería hablar sobre sus sentimientos con él, antes de que sea más tarde.

Suspiró con pesar mientras navegaba por instagram. No estaba prestando real atención a las publicaciones, hasta que una en específico llamó su atención.

Su corazón comenzó a saltar en su pecho, sus puños se apretaron con fuerza en el teléfono y en el mantel respectivamente, su quijada se tensó y sintió que el mundo se derrumbaba a sus pies.

Taehyung besaba muy felizmente a otro chico, uno rubio, más no se lograba apreciar quién al estar de espaldas, pero la profunda mirada del pelinegro parecía burlarse de él en esa foto.

Tomó sus cosas, dejó un puñado de dinero en la mesa (quizá más del necesario) y salió hecho una furia del restaurante con dirección a la casa del menor.

No se paró a pensar siquiera en tomar un taxi, tan sólo siguió caminando, dando grandes zancadas y sintiendo su rostro rojo de la furia que sentía en esos momentos.

Iba a golpear a Taehyung hasta el cansancio y después iba a comerle la boca.

🌙

No tardó mucho en llegar al edificio donde vivía el pelinegro. Se dirigió a recepción a tomar el elevador, siendo ignorado por el guardia, quien lo conocía a la perfección.

Sentía sus manos temblar de la furia pero a la vez de la desesperación que sentía de tener a Taehyung en sus brazos nuevamente, por lo que le costaba pulsar los botones correctos.

Por fortuna, sobrevivió al viaje en el ascensor, por lo que en cuanto llegó al piso de su amigo salió con rapidez hasta estar en la puerta de su departamento, la cual comenzó a golpear con fuerza una vez que sintió la adrenalina inundar su cuerpo.

ㅡ¡Kim Taehyung, abre la maldita puerta! ㅡContinuó golpeando sin importarle el escándalo que estaba haciendo por todo el pasillo.

Esperaba de todo corazón que no hubiese ningún vecino en casa, pues no estaba para tolerar quejas en esos momentos.