Un día normal y corriente en distintos servidores se abre un portal, nadie esperaría ir a un Karmaland dónde hay 9 heroínas y una de ellas tomaría la posición de ciertos dos híbridos.
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Una vez las chicas se presentaron, decidieron hacer una reverencia normal hacía Pandora para luego tener la intención de irse
Vegetta: tienen algo que hacer ahora mismo? - pregunto mirando con curiosidad a todas las chicas -
Nieves:yo te aclaro querido caballero - dijo mientras se acercaba al chico el cual se puso algo nervioso - mi queridísima Alexa demandó a Mónica, así que vamos a ir al juzgado solo para que esto se solucione - con solo decir eso tomo la capucha de su buzo para ponérselo, la verdad le daba vagancia ir al juzgado -
Pandora: no estaría mal que los héroes les acompañen - dijo mientras le pegaba en la espalda a Auron, haciendo que este de un paso hacia adelante, Mónica lo miro con duda sin decir nada - así las verán trabajar y dedicarse a lo que aman
Dulce: claaaaro - murmuró mientras miraba a la mujer mayor alejarse de los héroes junto a sapo Peta - voy a enseñarles cómo le meto droga a los pasteles y galletitas
Akira: pero mujer eso es ilegalisimo! - elevo la voz la rubia al escuchar el chiste de su amiga -
Kristina: como!? - exclamó sorprendida la oficial - Dulce sabes que los porros solo se permiten si tienes uno de consumo propio - explico mientras se acercaba a su amiga con la porra en mano -
Alexa; un poco de tranquilidad, que es obvio que era sarcasmo - dijo la castaña defendiendo a una de sus enamoradas, para después darle un codaso disimulado cuando iba a insinuar que no era un chiste - mejor vamos al juzgado que quiero recuper mis cosas ya
Mónica: el testamento dice que todo queda a mi nombre, así que nada de tus cosas - murmuró con aires de superioridad mientras pasaba al lado de la de baja estatura - así que menos lloros, solo vamos a perder el tiempo
Nieves: muah muah muah! - la de mascara hizo el clásico sonido del lloros para aligerar el ambiente lograndolo a la primera - ahora sí mientras vamos al juzgado podemos intentar convivir con nuestros invitados
Melany: mi niña, sabes que a mí me dan absolutamente igual sus vidas, verdad? - dijo la castaña mientras se ponía al lado de la de la máscara mientras todos caminaban directo al juzgado - solo quiero saber que tanto hablaste con esa Zorra
