El alfa Shōta Aizawa o mejor conocido como el héroe clandestino EraserHead, se encontraba patrullando una fría noche cuando de repente, en un oscuro y sucio callejón vio algo que cambiaría su vida, esto era un pequeño gatito de pelaje verdoso y espo...
Shōta se encontraba perdido en sus pensamientos, últimamente tenía muchas cosas en las que pensar, reacciono al sentir a Izuku moverlo con suavidad, se sentía avergonzado y nervioso, no recordaba si alguna vez se puso tan caliente por alguien.
Ni siquiera en su adolescencia le había pasado algo así, y al pensar y ponerse al tanto de su entorno noto su erección, no era demasiado notoria porque remplazo su deseo de lujuria y logro calmarse a sí mismo, pero aun así.
Aizawa odiaba sentirse de estas formas, atrapado, avergonzado, caliente y raro, ¿Pero cómo no sentirse así? Todo en su situación era raro, pero nuevamente la voz de Izuku lo trajo a la realidad.
—¿Está bien Aizawa-San? Si se siente incómodo puedo irme—
—No, tranquilo, solo me distraje un rato, lo lamento, todo bien— E inconscientemente le dio al peli verde una sonrisa sincera, poniendo al omega de color rosa.
El azabache espero unos minutos pero Izuku no parecía dejar de mirar los alrededores y a el mismo, como si estuviera distrayéndose mientras esperaba una orden, más autonomía, una cosa en la que tendría que trabajar cuando el omega interactuara con personas.
—Izuku ¿Puedes meterte en la tina y voltearte un segundo mientras me quito la ropa?—
—Claro Aizawa-San— Dijo el menor con una tierna y tímida sonrisa, acatando la orden con completa alegría.
Aizawa aprovecho para desvestirse lo más rápido posible y meterse a la tina junto a Izuku, el cual, para suerte de Aizawa, no vio su media erección, ambos tuvieron un baño largo y relajante juntos, el omega aprendía cómo donde debía lavarse con el jabón, cómo lavar su cabello, las distintas cosas que tendría que usar y demás, de hecho Izuku aprendía realmente rápido, aunque algunas cosas las hacia con torpeza.
La actitud del peliverde era tan respetuosa, obediente y demás que el alfa no hizo más que ponerse triste por el chico, era como alguien que recién empezaba a vivir, y lo más triste era que así era, pero para eso esta Shōta, para ayudarlo y quizá enamorarse de paso.
Aizawa busco una toalla nueva y se la regalo a Izuku, que una vez más estaba impresionantemente agradecido con todo, aunque tuvo que pedirle que saliera del baño mientras se secaba así mismo porque si bien a Izuku no le inquietaba seguía siendo incomodo.
Tan pronto como Izuku abandono el baño, Shōta quiso deshacerse de su problemita, pero se sorprendió al notar que realmente ya no tenia nada, dedicarse al omega y a sus cuidados sin pensamientos lujuriosos de por medio le quito la calentura, así que solo se seco.
Aunque al terminar algunos pensamientos indecentes se formaron en su mente, era realmente molesto, pero posiblemente tendría que acostumbrarse y aprender a controlarse, lo que será difícil porque nunca tuvo que hacerlo, reproducirse siempre fue el menor de sus intereses en la adolescencia.
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Hola mis amados lectores, los extrañe mucho, lamento que el capítulo sea tan corto, pensé en hacerlo más largo, añadiendo cómo pasarían la noche Izuku y Aizawa, pero pensé que sería mejor hacer 2 capítulos por separado, probablemente suba mi próximo capitulo el domingo, espero le allá gustado el capitulo, sin nada más que decir, bye!
