Inevitable Deseo

Capítulo 1

Agosto 3 del 2020
Berlín - Alemania.

Astrid Müller.

Comienza un nuevo día y yo me levanto para ir a mi primer día de universidad luego de las vacaciones, me levanto con algo de pereza y me dirijo hacia el baño de mi habitación me quedo viendo la bañera en lo que hago mis necesidades pero niego con la cabeza, se me iría el tiempo dentro de la tina. Termino mi refrescante ducha y hago todo los paso para mi aseo personal, me seso mi hermoso cabello y me lo peina una vez esta listo, salgo del baño con el albornoz y voy hacia mi armario, busco que colocar me y una vez tengo todo me visto. Hoy visto un lindo crop top de color café con espalda descubierta, con unos joggers beige y un par de converse del mismo color.

Una vez a listo todo lo que necesito en una mochila para la universidad, salgo de mi habitación y bajo las escaleras. Me encuentro con mi abuela en la cocina y le doy un beso en la mejilla.

-Buenos días abuela- le digo.

-Buenos días mi sol, cómo dormiste?- me responde ella mientras la ayudo a colocar la mesa para el desayuno.

-Bien abu aunque un poco nerviosa por mi primer día, ya sabes- le digo y ella me regala una sonría tranquilizadora.

Vemos al pequeñín de la casa bajar las escaleras ya con el uniforme del instituto, le doy una sonrisa y me la devuelve mi precioso hermanito.

Desayunamos los tres y después de terminar me voy a lavar los dientes el baño de abajo, una vez lista espero a Volker para irnos.

-Les deseo un buen día mis pequeños- la abuela nos dice mientras nos despedimos cada uno.

Afuera de la casa nos espera el chofer para llevarnos, una vez adentro le acaricio la cabeza a mi hermano. Sé que también está nervioso aunque no lo quiera hacer notar, mi pequeño.

El y la abuela son lo más importante para mí.

El recuerdo de cierta persona llega a mi y rápidamente intento sacar lo, no sé debe de acordar de mi y yo como una tonta dedicando le mis pensamientos.

Salgo de mis pensamientos cuando noto que ya hemos llegado al instituto de Volker, le coloco la mochila y lo ayudo a bajar del auto en lo que el chofer nos abre la puerta.

-Cuídate mucho si pequeño?- le digo una vez estamos en la entrada del instituto- Cualquier cosa que pase ya sabes que aquí estoy yo y nana para lo que necesites si?

Me da un asentimiento de cabeza y le dejo un beso en la frente. Cuando estoy por irme para dejar lo entrar me sorprende abrazando me fuerte.

-Te amo- me dice haciendo que mi corazón se derrita ya que muy poco demuestra sus sentimientos.

-Yo te amo más mi príncipe- le respondo y me separo de él.

Lo veo alejarse y me duele tanto esto, porque si mis padres estuvieran aquí con nosotros el no hubiera cambiado tanto, le afecta tanto o más que a mí y afortunadamente vivíamos con la abuela pero aún así la herida sigue ahí como si hubiera sido ayer, me seco el par de lagrimas que se me han escapado y volteo de regreso al auto.

10 minutos después ya he llegado a la universidad, veo la hora y todavía faltan 10 minutos para que empiece mi primera clase, ya tengo mis horarios y solo tengo que buscar el salón de clases. Ya llevo más de 5 minutos buscando el salón que me toca y no lo encuentro, me empiezo a poner nerviosa no me gusta llegar tarde y menos dar esa impresión.

Sé que debo preguntar pero me da algo de vergüenza, suspiro y me acerco al grupo de tres chicos que veo hablando en uno de los pasillos.

-Disculpen la interrupción pero realmente estoy perdida y no sé donde queda el aula 3B- le digo a todos esperando una respuesta. Pasan los segundo y nadie responde, estoy por darme la vuelta ya que he sido ignorada por estos idiotas.

-Segundo piso, a la izquierda- interrumpe mi huida una voz grave, me doy la vuelta para agradecer le y quedo quieta un segundo admirando a tremendo hombre.

Dioses!!

-Gracias eh...- espero que me diga su nombre.

-Steven Weber, un gusto- me responde con un guiño

Asiento y me quedo ahí parada hasta que recuerdo que tengo clases gracias al timbre que se ha escuchado.

-Y tú eres?- me dice con su cara seria, aclaremos que siempre estuvo con esa cara desde que me acerque.

Pero yo solo digo.

-Gracias Steven Weber por tú amabilidad- le respondo y finalmente me doy la vuelta y me dirijo hacia el ascensor para poder llegar a tiempo a clases.

Antes de que se cierren las puertas puedo sentir su intensa mirada y lo compruebo al chocar la mirada con él.

Sé que no debo estar pensando ahora mismo en eso, pero que hombre para comerse.

No tanto como nuestro papi rico Axel.

Ay ya cállate vocesita irritante, por si no te recuerdo es nuestro tío.

Ay si, pero bien que le tenemos ganas.

Decido ignorar ese último pensamiento por que sé que no es cierto o al menos trato de convencer me de eso. La verdad siempre me he sentido atraída hacia mi tío pero nunca he dicho ni hecho nada que me delate, todo comenzó cuando tenía 16 años en una fiesta de disfraces un año antes de la muerte de mis padres, ninguno sabía que éramos el otro y simplemente nos besamos. Si lo sé super wtf.

De verdad que nunca me habían dado un beso así, tan pasional y demandante.
Cuando me quise dar cuenta tuvimos que separarnos y yo huí como una cobarde porque lo reconocí y tenia miedo de que el haya podido reconocer me, gracias al de arriba ese día tenia una peluca castaña así que no creo que se haya enterado nunca que se besó a su sobrina y tras de eso estaba tan duro como una roca.

Decido dejar esos pensamientos de lado, el después de eso simplemente desapareció y solo hablada con mi papa lo necesario, hasta el accidente de la muerte de mis padres que fue la última vez que lo vi, la verdad lo extraño pero he aprendido a vivir con eso, a Volker también le afectó su ida ya que eran muy apegados y a él simplemente no le importó, cuando más lo necesitábamos no estuvo y me duele pero ya no me afecta como antes, entendí que para el simplemente no somo tan importantes como para visitarnos.

Cuando me quiero dar cuenta ya he acabado con las primeras 4 clases del día y me encuentro en la hora del descanso.

Me siento en una mesa del patio de la universidad y me escribo mensajes con las chicas, la verdad la extraño, desafortunadamente tuvieron que ir a otra universidad y yo fui aceptada en esta, hablamos un rato por nuestro grupo y me entretengo hablando con ellas y algunos compañeros de la universidad.

-Hola- doy un respingo cuando siento esa voz hablar me muy cerca de mi rostro. Volteo mi cara y me encuentro con la linda sonrisa de Steven. Lo miro con los ojos entrecerrados.

-Que te pasa?- le digo con cara enojada.

-No creí que fueras tan fácil de espantar- me dice el idiota engreído- solo quería saber el nombre de la chica a la cual ayude generosamente.

-Pues tendrás que morir sin saber lo- le digo y decido ignorar su presencia a mi lado.

-No lo creo, de alguna manera lo sabré- me dice para luego sentir como se levante de mi lado y se va quien sabe donde.

Y a este que bicho le picó?

No le doy importancia y decido mejor leer un libro en lo que se acaba el descanso.