adaptación | Kim Taehyung es un omega mayor de edad, sin pareja por decisión personal.
A la edad de 15 años el joven peli negro presentó su celo, y así mismo, sus ganas de someterse a un alfa. El destino hará de las suyas una vez más, enviándole su...
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Taehyung tenía 12 años cuando se había presentado como omega. Claramente estaba insatisfecho con eso, pensaba indudablemente que sería un alfa como lo eran sus padres, un alfa puro. El destino a veces solía ser cruel.
A los 15 años se presentó su primer celo. Estaba en su habitación, leyendo unas historietas de héroes y sintió un calor sofocante desprender de su cuerpo.
Dolor, en su vientre y piernas. Intentó levantarse de su cama para llamar a su madre pero sólo pudo caer al suelo en un peso muerto.
Soyoon, sabía claramente que el celo a veces podía llegar a los 15 en los omegas, y 18 en los alfas. No se sorprendió que su hijo estuviera desparramado en el suelo, jadeante y llorando debido al dolor y excitación que sentía.
Le ayudó a levantarse para acostarlo de nuevo en su cama para ir a una farmacia cercana a comprar algunos supresores y vitaminas.
La mujer pelinegra iba a paso rápido a su destino, después de todo, la droguería local no quedaba muy lejos de su casa. Caminaba viendo fijamente hacía el frente pero una pequeña silueta, o mejor dicho, dos siluetas estaban tras ella siguiéndola.
La mujer se asustó pero notó que se trataba de solo una madre y su hijo menor.
Caminó hasta llegar a una esquina. Se detuvo para poder cruzar la calle y al fin, llegar a su destino. La pequeña mujer le seguía en silencio tomando de la mano a su pequeño hijo.
Eso la desconcertó, porque pese a que se le hacía muy conocida nunca la había tratado en su vida.
Entró al lugar dispuesta a encontrar los supresores para su hijo, caminaba por los pasillos rápidamente hasta que sintió chocar con algo, o en este caso, alguien.
Era el pequeño niñato que tenía la mujer tomado de la mano. Un poco consternada por ello, decidió agachar su cuerpo para quedar a su altura.
— Hola pequeño, ¿te has perdido?.— le dedicó una minúscula sonrisa al menor.
— Se-Señora.. usted huele muy rico.— dijo eso para agachar su cabeza en señal de vergüenza.
La pelinegra quedó estática en su lugar, supuso que el niño hablaba de su perfume y se sintió halagada.— Owww, gracias ternura~.— alargó las palabras y tomó las mejillas del niño.
— ¿Puedo respirar un poco más?.— sin duda, el niño sabía que eso era una falta de respeto pero ante su incapacidad para respirar olores y que este le haya endulzado el gusto, era definitivamente, algo que no podía desaprovechar.
La joven mujer rió enternecida y expuso su cuello, cerca de sus glándulas donde su esencia era más fuerte. Jungkook como todo un cachorro se acercó a la mujer desesperado por oler e impregnarse de ahí.
Pero grande fue su sorpresa al no sentir nada más que el perfume artificial de su camisa.
El niño se sintió indignado y respiró cerca de sus brazos inconscientemente y consiguió de nuevo, ese dulzor en una esencia, desconocida para él.
El niño saltó emocionado, tomó con cuidado el brazo de la mujer y lo acercó a su nariz. Un leve ronronear se escuchó en el pasillo donde estaban, casi desierto por cierto.
Soyoon no entendía muy bien todo eso, aún así, se dejó hacer. Quería que el niño estuviera tranquilo, realmente se le hacía adorable.
Cristal había llegado "justo a tiempo" y se quedó perpleja ante la escena que le regalaba su hijo. Primero que nada, no sabía porque le pidió que siguiera a una desconocida y segundo, porque se había desaparecido en la farmacia. Supuso de que se trataba, pero su lado omega se sentía tan triste y traicionado porque su pequeño cachorro podía oler la esencia de esa mujer, que a leguas se notaba que era una alfa, y no la de ella que era su madre.
Caminó despacio, y llamó a su hijo suavemente. La mujer pelinegra levantó su mirada y sonrió, se puso de pie rápidamente y saludó cordialmente a la mujer más baja.
— H-Hola, disculpe a mi hijo.— la más baja estaba muy avergonzada.
— No se preocupe, es una criatura muy linda.— respondió la alfa sonriendo levemente.
—Bien, puedo explicar su situación... —miró a su hijo respirando tranquilamente el brazo de la rubia.— ...él desde muy pequeño no conseguía sentir las esencias y era muy difícil para él buscarme sin necesidad de llamarme o llorar... últimamente, Jungkook ha estado más perceptible y atento a los aromas, principalmente hacia los omegas pero veo que usted es alfa, sin ofender.
Soyoon pareció pensarlo un poco, mientras veía al cachorro jugar con uno de sus brazaletes. Lo que le pareció curioso es que ese mismo brazalete su hijo lo había tenido hace unos días atrás, pues ella le pidió que se lo guardara.
Lo que más le sorprendió fue que el niño estaba pegada a uno de los brazos donde Taehyung fue cargado, y recordó que el niño no parecía agradarle su aroma.
Entonces la rubia sonrió porque ya lo entendía.
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!buenaaas¡, me emociona mucho comenzar esta adaptación, y espero que les vaya a gustar.💕
¿como la pasaron hoy?, cuéntenme su día, ¿han bebido agua?🧺
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