Uno

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"Desde el principio..."

Lo acepto, estaba nerviosa, nunca había pertenecido a un grupo en particular y menos uno tan importante e influyente, siempre era yo y mis amigas del jardín de niños, en mi instituto anterior era solo una chica más...bueno era un poco popular, pero esto, esto me haría mas que reconocida, me haría importante, podría decirse famosa, miles de chicas matarían estar en este instituto y mas en este grupo o por lo que veo "secta", también acepto que ellas me producen algo de miedo pero no puedo juzgarlas tan pronto a penas si llevamos unas cuantas horas de conocernos en persona.

Aun es difícil aprenderse sus nombre, a ver...repasemos...eh la chica de cabello castaño, alta y delgada, con unos ojos hermosos pero que al verlos detenidamente te producen un escalofrió por todo el cuerpo...es Candy Wells, pero no se dejen llevar por su nombre ya que no es nada dulce, luego la chica que esta a su lado seria...Wenn Collins, si, la chica de hermosa cabellera rubio claro, desde que llegue no ha parado de sonreír, me pregunto si ella será siempre así, la chica a su izquierda es Nate Adams, seria como la mas sensata, se ve que piensa dos veces antes de actuar, aun no puedo creer que ese cabellera roja sea natural, y finalmente Alex Williams...era por así decirlo la mas coqueta...perra de las chicas, su vestimenta no era nada decente y en estos momentos estaba en las piernas de un chico, pero sus expresiones eran agradables y eso me hacia sonreír, era una chica muy amistosa. Es un hecho...no encajare aquí.

-¡_______!-la voz suave pero determinada de Candy me desvió de mis pensamientos

-Si... ¿si?

-Te pregunte que si te habías fijado ya en algún chico-negué con la cabeza.-Bueno primero que todo te dejare claro las cosas, puedes elegir a cualquier chico del instituto menos al mío-trague saliva y asentí

-Y...cual... ¿Cual es el tuyo?-pregunte

-¿Ves a ese chico sexy de ojos miel que viene hacia acá? Nena ese caramelito es todo mío-se levanta de su asiento y salta a los brazos de a juzgar por su chaqueta "El capitán del equipo de futbol" y no era de extrañarse, el mas popular con las mas popular, era ley.-Mira cariño ella es _______-dijo para luego susurrar-La nueva integrante-él río y me sentí ofendida

-¿Enserio? ¿Eso?-gemí de indignación ¿No le parecía suficientemente buena para pertenecer al grupo? -Ella dice santa por todos lados, nunca será una Linda Perra

-Se positivo cariño, pronto la domesticaremos-gruño y sentí nauseas ¿Qué clase de personas le gusta que les llamen perras? Un momento...pronto yo seré una perra también....oh mierda. La campana de cambio de clases sonó

-Es hora-le musito Nate a Candy, ella empujo a Zayn aun lado y a él no le molesto, incluso mordió sus labios, a el le gustaba que lo trataran así...rudo.

-Bien chica ¿Estas lista?-me pregunto Candy

-¿Para...que?

-Tu rito de iniciación-susurro Wenn riendo, esta chica cada vez me parecía mas extraña

-¿Ri...rito?-tartamudee ¿Qué era esto? ¿Una comunidad satánica? ¿Una secta de vampiros?

-No creerías que para ser una de nosotras sola tenias que decir "acepto" esto es mucho mas que eso-dijo Candy y volví a sentirme pequeñita, esto era serio.

-De acuerdo-dije sin dudar, no podía echarme de para atrás, esto era lo mejor aunque no se viera así, ellas me ayudarían, ellas me devolverían la sonrisa que me quitaron...bueno al menos tenia esa esperanza.

Me condujeron por una serie de pasillos, cruzamos el campus y entramos a un edificio "Nuestra Fraternidad" donde al parecer aquí nos reuniríamos y ¿Dormiríamos? Y efectivamente así era habían 5 habitaciones, la casa estaba llena de lujos y mi habitación impecable, me condujeron por las escaleras hacia lo que era el sótano, la luz era tenue acompañada de velas aromáticas, habían retratos en las paredes, de cada una de ellas claro, y un mural lleno de fotos, habían unas cajas selladas, fue lo que mas me llamo la atención.

-Veo que estás curiosa por saber que hay en esas cajas-dijo Nate, asentí-Allí se guardan los contratos, nuestros contratos

-¿Contratos?-pregunte, esto era tan nuevo para mi

-Es un contrato donde se especifica lo que dejaras, lo que harás y lo que no harás y lo mas importante, el pasado, ese pasado que solo tu conoces, ese pasado que te condujo a nosotras.-miles de imágenes y recuerdos de aquel día cruzaron tu mente, te sentiste mal de inmediato

-En esta habitación te liberaras de todo lo que te impide seguir adelante y aquí morirá ese pasado para hacer un mejor futuro-Finalizo de decir Candy

Ellas se cubrieron con unas batas largas de color rosa y un antifaz blanco, ok esto era el colmo de la rareza, hicieron un circulo donde yo era el centro, Candy la líder saco el contrato de una de las cajas empezó a leerlo con todas las reglas, lo que debía y no debía a hacer, lo que debía dejar atrás y lo que debía aprender.

-Y ante todo nunca bajo ninguna circunstancia debes enamorarte-dijo Candy y volví a sentir ese escalofrió recorrer mi espalda

-Pero un momento... ¿Tu no estas enamorada de "tu chico"?-pregunte algo desconcertada

-Zayn es solo un pasatiempo, no te equivoques, yo cambio de chico más que de ropa interior-explico Candy, asentí y me sentí estúpida, todas se sentaron cruzando sus piernas... ¿De que me perdí?

-Ahora que sabes y entiendes lo que debes hacer y lo aceptas es hora de que saques lo que ha afligido tu corazón todo este tiempo-sentí ganas de vomitar, no quería hablar de eso, aun no estaba lista para enfrentarlo, negué con la cabeza

-No te preocupes, aquí muere el recuerdo, lo que estas pasando ahora todas lo pasamos-dijo Nate y me invito a sentarme, lo hice pero aun seguía negando con la cabeza, mis ojos se llenaban de lagrimas, no quería recordarlo

-No puedo...-musite

-Debes dejarlo ir...-toco mi hombro Wenn

-Mira que después de que nos cuentes tu experiencia nosotras compartiremos la nuestra, se que es difícil pero esto te liberara te hará sentir mejor, te lo aseguro-me dijo Nate

-Es una historia muy larga-dije con la voz cortada

-Tenemos tiempo-sonrió Wenn

-De acuerdo...comenzare desde el principio...-era ahora nuca, debía desatarme de esto, tenia que dejarlo ir, sacarlo y sepultarlo bajo miles de metros bajo tierra, forcé a mi cerebro a recordar aquella historia que con tanto esmero había escondido en un rincón de mis recuerdos pero que aun así me atormentaba día y noche...

*Flash Back*

No lo puedo creer, ya eran 3 noches que me hacia lo mismo. Cómo podía trataba de desviar esos molestos y nauseabundos sonidos aplastando dos almohadas contra mis oídos, la noche transcurría y esos quejidos se acrecentaban más y era imposible no oírlos, me levante de la cama y golpee el techo repetidas veces.

-¡Mamá! ¡Mañana tengo examen! ¡Paren ya!-grite pero fui ignorada completamente, 3 noches seguidas con el estúpido de Robert, él me agrada siempre y cuando no estuviera penetrando a mi mamá porque esto era lo que sucedía, gemidos, gritos y quejidos toda la maldita noche, agarre mi almohada junto con mi osito Eddy, aun teniendo 15 años no podía dormir si no lo tenia a la mano, me desplace por la sala y toque a la puerta de Liam, maldito suertudo desde allí no se podían oír los gemidos de mamá.

-¿Qué quieres?-dijo molesto abriéndome la puerta, Liam era un encanto excepto cuando lo despertaban

-Es mamá de nuevo, necesito hospedaje-dije mostrando mi almohada

-Que mas da, entra-sonreí y me tire a la cama, me hice al rincón abrazando a mi Eddy, Liam se coloco detrás de mí, estaba a punto de quedarme dormida hasta que un molesto olor me distrajo.

-Liam...-susurre

-¿Que?-contesto algo dormido

-¿Te tiraste un pedo?

-Si...-podía jurar que él tenía una gran sonrisa en el rostro, no solo se lo había tirado, estaba orgulloso de haberlo hecho

-Te odio...

Pretty BitchesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora