Capítulo 29

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Más estupideces de YZY porque sé que te gusta cuando actúa como una idiota.

BAMF Hua Cheng porque quiero decir --- ¿cuándo no lo es?

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Yu Ziyuan no podía moverse. Un segundo estaba apuntando con su arma al hombre, y lo siguiente que supo fue que Zidian había desaparecido.

"Tú... tú... ¡¿Qué le has hecho a Zidian?!" Gritó, pero no pudo ocultar el temblor en su voz.

Este hombre ni siquiera levantó un dedo cuando detuvo su ataque. Ni siquiera pestañeó para destruir a Zidian. Esa arma espiritual era una herramienta espiritual muy conocida por su fuerza, pero ahora... no queda nada de ella, solo se convirtió en polvo.

"He pulverizado a tu querido Zidian, obviamente. Veamos si todavía puedes actuar como una persona elevada y poderosa, sin esa arma que enmascara lo débil que eres en realidad. De todos modos es inútil, ya que no puedes usarla sin que te haga daño también".

"¿Cómo? Cómo pudiste... tú... ¡TE VAS A ARREPENTIR DE ESTO! ¡TOCASTE A UNA SEÑORA DE LA SECTA SIN SER PROVOCADO! ¡HAS DESTRUIDO MI ARMA! ¡ESO ES UN CRIMEN CONTRA MÍ Y CONTRA YUNMENG JIANG! ¡HABRÁ CONSECUENCIAS! ¿SABES QUIÉN...?"

"¿Parezco alguien a quien le importa una mierda quién eres, Yu Ziyuan? Ni siquiera me importa alguien como Wen Ruohan, a quien todo el mundo del cultivo teme. ¿Qué te hace pensar que tú importas? ¿Quién te crees que eres para que me importe tu maldita existencia? ¿Y disculpa? ¿Sin provocación? Estabas a punto de golpearme, ¿qué esperas que haga? ¿Quedarme ahí y aguantar para inflar tu asqueroso ego? No gracias, no soy un tal Jiang Fengmian que es demasiado cobarde y no podría hablar contra su descerebrada esposa".

Nadie... ABSOLUTAMENTE, NADIE le habló a Yu Ziyuan de esa manera. Todas las personas que la habían enfadado no tuvieron más remedio que callarse y asumir las consecuencias de sus actos, pero este hombre... este hombre le contestó como si fuera barro bajo sus botas. Este hombre no la teme. No le importa lo que ella es capaz de hacer. ¿Por qué? Incluso Jiang Fengmian no le contesta. Nadie se atrevió a desafiarla. Ella era libre de decir y hacer lo que quisiera. Esta es la primera vez que se enfrenta a alguien que no se preocupa por su posición.

"Todavía no hemos terminado. Me aseguraré de que pagues por esto". Le susurró enfadada y se volvió hacia la puerta. Pero cuando intentó abrirla, se quedó cerrada.

"Ya, ya, Yu Ziyuan, ¿vas a algún sitio? No, no lo creo. Viniste aquí gritando y maldiciendo a la Secta Gusu Lan, intentaste atacar a su Señora de la Secta, intentaste azotarme con Zidian delante de los Líderes de la Secta, ¿y crees que te vas a salir con la tuya? Sin mencionar que sacaste tu arma cuando está prohibido hacerlo sin permiso, especialmente cuando no hay ninguna emergencia. ¿No eres demasiado rápido para huir? Esto no es Lotus Pier donde aunque te comportes como una maldita perra, nadie te va a detener. Estás avergonzando a tu secta como su representante al venir aquí actuando como una mocosa malcriada que conseguiría lo que quiere con solo un "¡madre, padre, por favor!". Has perturbado la paz de los Recesos de las Nubes. Tal vez quieras ponerte al día con tu hijo, ¿por qué no vas y te arrodillas con él, hm?", se burló Hua Cheng. Le gustaba mucho irritar a esta perra, cuanto más se enfadaba, más se volvía estúpida. ¿No es eso agradable? Tendría más pruebas contra ella, después de todo, una de sus mariposas está escondida en algún lugar, grabando todo lo que pasó aquí.

"¡No puedes castigarme! Soy una señora de la secta".

"Tu título no te hace automáticamente intocable Yu Ziyuan. Como dijo Hua Cheng, esto no es el Muelle del Loto. Rompiste las reglas de los Recesos de las Nubes, lo que significa que le faltaste el respeto a Gusu Lan. Tendremos que recluirte aquí mientras llamo a tu líder de secta para que venga". Qingheng-jun declaró con un rostro inexpresivo hacia ella.

Yu Ziyuan hervía de ira, pero ¿qué podía hacer? Zidian se ha ido, y ella no puede desenvainar su espada, causará más problemas.

"¡Tsk, como si necesitara que viniera aquí! ¡Yo también soy el líder de la secta del Muelle del Loto! Estamos en igualdad de condiciones".

"¿Igualdad de condiciones? Y, sin embargo, por lo que he oído, cada vez que tu marido expresa sus opiniones e ideas que no coinciden con las tuyas, afirmas que está menospreciando tu capacidad de decisión." Comentó sarcásticamente Hua Cheng y se apoyó en la pared mientras cruzaba los brazos y levantaba las cejas hacia Yu Ziyuan.

"¡Es porque lo hace! Nunca me escucha!"

"Tú tampoco le escuchas. ¿Significa eso que estás despreciando su capacidad de decidir por SU PROPIA SECTA? Yu Ziyuan, creo que estás olvidando que entre los dos, Jiang Fengmian es el Jiang por sangre, tú eras el forastero que acaba de casarse con su familia, él tiene más derechos en su propia secta que tú. No tienes derecho a ir allí y exigir que todos te escuchen, una mujer que se niega a ser llamada 'Señora Jiang'. Querías que te llamaran 'Señora Yu', ¿no significa que no quieres ningún poder asociado a ser una Jiang? Ahhhh, ¿por qué estoy hablando contigo? Tu cabeza está llena de aire. Esto es una pérdida de tiempo". Comentó Madam Lan mientras se sentaba en el asiento vacante cerca de su marido.

Eso hizo callar a Madam Yu, pero no porque se diera cuenta de sus defectos como esposa, sino porque estaba enfadada porque se estaban confabulando contra ella. ¿Quién se cree esa gente? ¡Ella nunca se equivocó! Decidió callarse porque siempre será mejor que ellos, algún día, estos estúpidos crecerán.

Mientras todos estaban sentados en silencio esperando al Líder de la Secta Jiang, Jiang Wanyin fruncía el ceño mientras se arrodillaba en la sala de castigo.

Estaba furioso cuando le castigaron por culpa del hijo de un sirviente. ¿A quién le importa si ese traidor muere? ¡Se lo merece de todos modos!

"A-Cheng".

Jiang Wanyin levantó la vista del suelo para ver a su hermana de pie frente a él.

"Está bien, A-Cheng. A-niang está aquí, y he oído que A-die también vendrá. Arreglarán esto y todo irá bien, ¿eh?". Su hermana le consoló.

"Por supuesto, Jiejie. A-niang es muy capaz de arreglar las cosas. Ella hará que esos malditos Hua que Yunmeng Jiang siempre serán más grandes que ellos". Dijo Jiang Wanyin con la cabeza alta mientras su hermana le sonreía suavemente.

Detrás de un pilar, un cierto duende verde está sonriendo tanto que cualquiera que lo viera habría huido de la mirada maligna de su rostro.

'Veamos si tu madre será extremadamente capaz ahora, si no solo será la destrucción de Yunmeng Jiang, sino también de Meishan Yu'.

Hua XianleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora