Capitulo 11

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La mirada de Teresa decía mucho, al menos ahora da la cara, vi cómo me miraba Marcos. ¿Porqué me mira así? Bueno sigamos que tenemos una misión. Actué con indiferencia incluso hice como si no me hubiera dado cuenta que están aquí. Seguí bailando siempre sonriendo y con Lara en brazos continuaba hasta acercarme al señor Malakof, se le veía encantado. Para mi gran sorpresa me dio un pañuelo color turquesa.

Terminé mi baile junto con las demás bailarinas y regresamos al vestidor.

-Estuviste fabulosa

-Gracias

-No me agradezcas solo digo la verdad

-Tan amable como siempre. ¿Porqué Malakof me dio este pañuelo?

-Serás su favorita por esta noche, te invita a cenar con el

-¿Sera que puedo ir con el traje?

-Allí te dejé un vestido

-Gracias, ten a Lara

-Hasta luego

Todos los ojos estaban encima de mí, parecían asombrados por mi vestimenta, no se si me hayan reconocido. Con el pañuelo en la mano me dirigí a la mesa de Malakof.

-Buenas noches, señorita

-Buenas noches

-Dime tu bello nombre

-Estefany

-Segura que te llamas Estefany

-¿Cómo se llama usted?

-Me llamo José pero mis amigos me dicen Jo. Llamame como quieras

-Dado a que aun no le conozco prefiero llamarlo por su nombre

-Muy bien, yo te llamaré Fany

-¿Por qué?

-Me gusta ese nombre para ti

-Es muy lindo, gracias

-Bailas muy bien Fany

-Lo tomo como un cumplido, se lo agradezco

-Solo digo la verdad querida, me gustaría tener una mujer como tú. Nunca he tenido una bailarina como esposa.

-....

-Por esas deliciosas caderas que tienes seguramente podrás darme excelentes hijos con una salud estupenda

-....

-Quiero que seas mía. Todo lo que quiero de alguna manera u otra lo obtengo.

-¿Ha tenido muchas esposas?

-Tengo tres y son maravillosas, se entienden muy bien

-Me lo imagino, pero no cree que sea demasiado pedirles de entenderse bien con una mujer que no conocen para nada.

-Me temo que ellas tendrán que aceptarlo, mis esposas siempre me obedecen

-¿Acaso ve a las mujeres como objetos?

-Tengo valores señorita

-¿Podría decirle cuáles por favor?

-¡Qué audacia!

-Muchas gracias

-Pará responder a tu pregunta, mi madre me educó muy bien

-¿Le enseñó a coleccionar mujeres?

-¿Cómo?

-....

-No para nada, me refería a que ella me enseñó a respetar a las mujeres

Mi nueva yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora