𝗠𝗢𝗩𝗘 ୫ LixChan

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Bang Chan casi saltó cuando escuchó la voz de Felix en el intercomunicador indicándole que ya estaba abajo esperando por el. Sobó la cabeza de su mascota como despedida y salió del departamento con los nervios en punta.

No podía no estar nervioso, Felix era alguien tan impredecible que no podía adivinar cual seria su próxima jugada para ponerle los nervios de punta con sus comentarios y sus miradas.

Una vez saliendo del umbral de su departamento, vió al azabache que vestía una chaqueta de cuero negra y unos jeans claros, apoyado en su moto con toda su atención en su teléfono.

Maldito, que bien se ve.

"Estoy aquí" Bang Chan dijo una vez estuvo lo suficientemente cerca como para llamar la atención de Felix.

"Hey Chan, estaba a punto de llamarte. ¿Por qué tardaste?" Felix se levantó de la moto y se acercó a él para encararlo con una linda sonrisa que siempre lo acompañaba.

"No tardé tanto, no exageres" Bang Chan encogió sus hombros restandolé importancia. "Te dije que no me subiría a esa cosa" Señaló a la moto estacionada.

"Vamos, no seas miedoso" Felix pasó sus manos alrededor de la cintura de Bang Chan pero no duró mucho, pues el menor se alejó. "Manejaré lento"

Bang Chan debatió unos segundos si debería subir arriesgando su vida en esa moto o seguir respondiendo con un "no" rotundo hasta que Felix se cansase de ello.

Pero decidió hacer lo primero porque sabía que Felix no dejaría de insistir, fue por eso, no tenía nada que ver su rostro de cachorrito suplicante, por supuesto que no.

"Bien pero si muero, que sepas que te perseguiré hasta el resto de tus días" Bang Chan se alejó subiendo a la moto primero.

"Te llamaré ojitos dramáticos" Felix se acercó después montándose a la moto delante de Bang Chan. Giró la llave para prender el motor haciendo que Bang Chan se tensase con el sonido que emitía. "Será mejor que te afirmes o tus deseos de morir se harán realidad"

Bang Chan rodó los ojos pero de inmediato se sujeto del abdomen de Felix cuando este empezaba a enderezar la moto.

Cuando Felix empezó a acelerar los ojos de Bang Chan se cerraron apretando fuerte de su agarre, porque Felix no estaba yendo nada despacio. Es más, lo sintió reír mientras lo apretaba; el lo estaba haciendo a propósito y Bang Chan le reclamaría cuando bajasen.

No fue tan malo como pensó que sería, o al menos no había muerto en el intento pero por supuesto no se lo admitiría a Felix para aumentar su elevado ego.

"No puedo respirar"

Bang Chan cayó en cuenta que de que ya habían llegado al destino (que por cierto, desconocía) cuando Felix dijo aquello.

"¿Ves?, no moriste" el mayor sacó la llave de la moto y se acercó a Bang Chan.

"¿Dónde estamos?" Bang Chan ignoró lo obvio y preguntó cuando no ubicaba el lugar frente a sus ojos.

"En la mejor pizzería de la ciudad"

Ambos caminaron hasta la entrada y espero que Felix dijera su reservación. Bang Chan se percató del buen gesto y lo serio que se había tomado Felix la salida de "amigos".

Fue un buen rato, ambos tenían temas que conversar y las risas nunca faltaban. El menor se sorprendió de lo mucho que tenían en común con Felix y lo agradable que estaba siendo con el.

Felix insistió en pagar la cena y Bang Chan se lo permitió solo porque dijo que podría ser el quien pagara la próxima vez. Cuando salieron del restaurante y volvieron a la moto, Bang Chan miró con el ceño fruncido en la carretera al percatarse de que no era ese el camino a su casa.

"¿Dónde estamos?" Dijo Bang Chan una vez que la moto paró. "¿No me vas a secuestrar, no?"

"Es exactamente lo que estoy haciendo" Felix respondió quitando la llave para bajarse del vehículo.

Cuando Bang Chan se quitó el casco y se bajó, observó el precioso muelle frente a él, era de noche y la luna estaba alumbrando más que todos los días, reflejándose en la laguna.

"¿Has venido aquí antes?" Preguntó Felix mirando el perfil del mas pequeño que estaba embobado viendo el paisaje frente a él que no percató los ojos posados en su persona.

Y Felix también estaba disfrutando aquella vista, porque Bang Chan era hermoso, sus largas pestañas eran hermosas, su nariz simétricamente perfecta era hermosa, su cabello oscuro como la noche era hermoso, sus ojos, aquellos que Felix no dejaba de admirar también lo eran, todo de él era precioso.

"No, pero me hubiese encantado venir aquí antes" respondió Bang Chan mirándolo. "¿Tú vienes seguido?"

"Solo cuando necesito pensar y tener un tiempo para mi"

"Me gusta, la vista es hermosa" El muchacho más pequeño respondió posando sus preciosos ojos de nuevo al frente.

"Ya lo creo yo" Felix respondió no refiriéndose al panorama que les regalaba la luna y la laguna exactamente.