Capítulo 2

4 1 0
                                    

Ya se habían acabado las clases y yo me disponía a dejar mis libros cuando Naelson apareció dándose un pequeño golpe en el codo con la taquilla de al lado.

-Auch.. ¿Oye que tal te a ido bro?

-¿Te has hecho daño?

Le pregunté pero no le miré, estaba ocupado en mis cosas.

-Si, no me dolió tanto. Pero te pregunte que qué tal te a ido.

-A si, me a ido bastante mal.

-¿Por qué bro? ¿Ahora que has hecho? Jajja

-Llegar tarde por ayudar a la modelo.

-Espera espera.. ¿¿Has hablado con la modelo??

-Si

Naelson abrió mucho los ojos y la boca sorprendido, y se llevó una mano al pecho siendo dramático.

-¿Y cómo es ella? ¿Es maja? ¿Por qué la has tenido que ayudar? ¡A que es hermosa!

Terminé de recoger mis cosas ignorandole para salir del Instituto.

-Tengo hambre..

-Ya y yo bro jaja.

Me estaba llendo cuando le miré porque estaba haciendo cosas raras con su cara que siempre me da risa.

Estaba caminando mientras le miraba cuando choque con alguien haciendo que cayese al suelo.

-Lo siento, mi culpa.

Miré con quien me había chocado cuando ví a la modelo.

-Oh.. Eres tú modelo...

-Si... Eeeemm... Hola otra vez

Naelson estaba mirando sin creerse la escena mientras yo la ayudaba a levantarse del suelo.

-¿Te has hecho daño?

-No tranquilo, estoy bien.

Me dio una sonrisa y yo se la devolví de la forma más amistosa posible.

-Bueno, me tengo que ir ya, adiós Kim.. Adiós chico...

-Adiós Elisabeth...

Ella se fué y Naelson me miro asombrado.

-¿¿Es tu amiga??

-Compañera.

-Si claro. Aaaaay que mona, se a despedido de mi también.

-Si.

-... ¿Acabas de admitir que es mona?

-No, he admitido que se ha despedido de tí, no confundas mis palabras Nael.

-Ya ya, a mi no me engañas, para ti ella es más que una compañera, ¿¿verdad verdad??

-No.

-Claro claro, amigo, ¿a quien no le gustaría salir con la nueva chica que resulta es una famosa modelo y bailarina la cual es muy rica.. Y muy hermosa?

-A mi no me interesa la chica lo más absoluto, no la conozco.

Íbamos caminando hasta el parking, cuando llegamos yo me subí a mi moto y Naelson se despidió con la mano. Encendí la moto y me dirigí a mi casa.

Cuando llegue ví un coche el cual desconocía aparcado en mi puerta, con precaución me acerque a la puerta la cual estaba abierta. Me adentré en mi casa para descubrir a mi hermano pequeño dormido en el sofá con mi madre a su lado.

-¿Qué estás haciendo en mi casa?

-Vengo a traerte a tu hermano, es una molestia, ahora él es tú problema.

Una historia de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora