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Pov: Soobin José.
Las cosas en la casa estaban más tensas que las cuerdas de alto voltaje de la luz de la calle. Ni yo sabía cómo sobrellevar la situación.
Yeonjun pasó un día completo encerrado en el cuarto, na'más salía a comer cuando lo llamó mi mamá y después otra vez pa'dentro.
Me costó una bola alejar a Beomgyu de su cuarto porque sabía que iba a joderle la paciencia, y después serían capaces de guindarse a coñazos.Mentira, Beom le daría unos coñazos y Jun haría otro berrinche, no tengo paciencia para soportarlos.
Tío llamó y dijo que vendría el fin de semana, no quisimos hablar con mi mamá de si Jun se devolvería o no, ella decía que lo mejor era esperar a que él nos contara qué quería.
Pero ya pasaron cuatro días y esto no me lo calo más.Hoy era viernes, y todos íbamos a bajar al centro a comprar unas cosas que nos faltaban; queramos a no Beom y yo teníamos clases el lunes y mi mamá quería hacer pabellón para comer mañana en el almuerzo, así que todos vamos a salir a hacer diligencias.
Estábamos terminando de comer y coño, por primera vez en esta casa me preocupaba tanto silencio, sino fuera por el animal de Beom que a veces mastica con la boca abierta no se escucharía pero ni una mosca pasar.—Juncito, no te hace falta nada? Digo, como vamos a bajar pal centro en un rato—trató de romper la tensión mi mamá pero qué va, esa no se rompe ni con las arepas que una vez quisimos hacer Beom y yo a las once de la noche y quedaron más duras que una piedra.
—No gracias, tía—murmuró bajitico, dándose un buchesito de café.
Mi mamá me miró, yo la miré, miré a Beom, él me miró, miro a mi mamá, joda esto era peor que un partido de ping pong viendo quién tenía una excusa decente pa' manquesea sacarle conversación antes de que dejara la peluca y se fuera a encerrar en el cuarto otra vez como los carajitos esos emos por allá en el dos mil siete.
Miré el cuadro del sagrado corazón de Jesús que tenía mi mamá junto a los demás santos en una de las esquinas del comedor y coño, hasta a él le pedí consejos pa'que se me ocurriera algo rápido. Cuando lo ví empezar a montar sus corotos en el plato para ir a fregar a la cocina le pelé los ojos a mi mamá y le dí un codazo suavecito.
—Ay, entonces acompáñame por fa que necesito comprar unas cosas—pidió como quién no quiere la cosa.
—Pero...—de una empezó a pelarnos los ojos a Beom y a mi como queriendo lanzarnos por ese barranco y él irse a esconder por'ai.
—Beom y yo vamos a comprar otras cosas un poco más lejos y necesitamos que de pana acompañen a mi mamá—pedí tranquilo pero no dejaba de menear la pierna nervioso, coño volvió el silencio y de reojo ví que Beom se estaba como alterando, en cualquier momento podría soltar cualquier vaina.
—Está bien—dijo bajito yendose pa'la cocina.
Los tres nos vimos las caras pero soltamos el aire porque bueno, era un avance, más que bien ahora no hay que quitarle los ojos de encima.
De una recogimos todo, nos fuimos a vestir y a buscar nuestros corotos para ir saliendo, esperamos a Jun junto a la puerta y tenía una cara de muerto, sé que el otro día fué un poco pesado irse por primera vez en autobús pero tampoco pa'tanto, a mí me ha ido peor.—Cargas nada más la cédula, Juncito? Es mejor que dejes teléfono y todo lo demás, no vaya'ser que sin querer te lo quiten—pidió mi mamá tanteandole con cuidado los bolsillos.
—No tía, no cargo nada—dijo viendo los converse recién sacados de la caja.
Coño, está vez estaba vestido más sencillo, pero igual se notaba de aquí a Maturin que la ropa era recién comprada. Pero no vamos a decirle nada porque está más decaído que carajito en cumpleaños al que no dejan pegarle a la piñata porque a según que ya está grande.
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🔆Bueno chamo, esto es Venecuela🇻🇪
LosoweBuenas mis locos!!!! Vamos bien, o solamente vamos? jjdbkdksbks Wueno, sinceramente, les digo sinceramente, esto va a ser que se me alborotaron las lombrices y quiero ver si se ríen un rato. No sé, vamo'a ver cómo se arma esta cosa. Voy a poner a mi...