Ya no quiero ser fuerte, ya no puedo.
Viviendo entre sueños a medias
y peligrosas dosis de benzodiacepinas,
¿Cómo fingir que estoy bien?
Si pretender sonreír me rasga la piel,
soy quizá muy sensible para este mundo,
o solo un alma más que vaga sin rumbo.
No concilio el sueño hasta la madrugada,
cada amanecer me siento más cansada,
y no es que ya no quiera vivir, solo me duele pensar,
porque hay días que la existencia misma nos puede pesar.
ESTÁS LEYENDO
Versos al viento
PoetryPoemas variados, de esos que nacen de la oscuridad de la noche o del vacío que dejan esas conversaciones interminables en la madrugada, simplemente versos al viento...