💛Golden Obsidian🖤- [Minsung]

Capítulo 10

El ambiente empezó a llenarse de polvo, y este no tardó en ser sustituido por enormes trozos de cemento.

Chris sujetó a Han y a Seungmin con ambas manos y empezó a correr con ellos utilizando su super velocidad, sus amigos eran su prioridad en esos momentos de ansiedad y no podía pensar en nada que no fuera su salvación.

Seungmin intentó sujetar la mano de Jeongin antes de que Chris empezase su huída pero sus dedos no lograron entrelazarse, esos pocos centímetros entre sus manos se convirtieron en kilómetros de aflicción en el pecho de Seungmin.

—¡NO!-Grito desesperado—¡CHRIS PARA ESTAMOS DEJANDO A JEONGIN ATRÁS!.

Pero Chris ignoró sus gritos, no tenía tiempo para pensar y mucho menos para frenar, estaban sumidos en una cuenta atrás invisible, su vida pendía de un número exacto de minutos que no conocían.

Jeongin empezó a correr con todas sus fuerzas, las piedras del techo caían a pocos metros de él, miles de pequeños trozos volaban por el aire tan pronto las grandes piedras impactaban contra el suelo, atravesando su ropa y cortando su rostro, pero nada le impedía dejar de correr, tenía que salir de allí.

Los tres amigos llegaron a tiempo fuera de la nave, Chis y Han se tiraron al suelo aliviados, pero Seungmin aprovechó el momento en el que Chris soltó su mano para echarse a correr de nuevo dentro de la nave, con las lágrimas nublando su vista y su pecho inflamado por el cansancio, se negaba a dejar al menor ahí dentro, no tardó en encontrarlo tirado en el suelo a pocos metros de distancia.

—¡Jeongin!—Gritó abrumado al verlo desplomado en el piso.

—¡No! ¡Vete Seungmin! ¡No te acerques! ¡Todo se derrumbará en unos segundos!—Gritó desde el suelo incapaz de moverse por el dolor que había causado una piedra en su tobillo, pero el dolor en su pie no se comparaba con el miedo de ver a Seungmin bajo los escombros, no podía permitir que eso ocurriera.

—¡No merece la pena! ¡Ya es muy tarde! ¡No podré levantarme! ¡Vete!—Las lágrimas empezaron a deslizarse por sus ojos sin control, el oxígeno se negaba a extenderse por sus venas, lo único en lo que podía pensar era en que deseaban que Seungmin se diera la vuelta y corriera hacia su salvación.

—Por supuesto que merece la pena—Dijo el mayor pasando el brazo del menor por sus hombros y arrastrándolo de camino al exterior, los trozos de piedra que caían a su alrededor cada vez eran más grandes.

Como si fuera un ángel, la silueta de Chris se hizo presente a su lado, y sujetó a ambos para sacarlos de allí.

Dejando sus cuerpos a salvo en el suelo justo dos segundos antes de que el edificio se derrumbase ante sus ojos con un fuerte estruendo que les hizo taparse los oídos, mientras una enorme nube de polvo nublaba el cielo y se extendía sobre ellos.

—¡Estás loco Seungmin! ¡Podrías haber muerto!—Jeongin se abalanza sobre él en el suelo, pegándole leves puñetazos en el pecho, sintiendo sus músculos agarrotados y un fuerte pitido en sus oídos.

—¡Tu también habrías muerto pedazo de estúpido!—Grita en su cara, entre sollozos.

—¡Me importa una mierda! ¡Tu tenías a tu gente esperándote fuera! ¡Es que no pensaste ni por un segundo el dolor que les podías causar a tus amigos si esos malditos escombros cayeran sobre tí!—Le grita desesperado, aún golpeando débilmente su pecho una y otra vez, sin poder creerse como el mayor fue tan inconsciente de volver a por él.

—Tu también eres mi amigo—Confiesa en un susurro sujetando sus manos para frenar los golpes que no estaban haciendo ni el más mínimo efecto en él.

—Y una mierda Seungmin, tu me odias, de hecho no entiendo por qué demonios has entrado a por mí cuando llevas días deseando que desaparezca de la faz de la tie—Sus palabras se ven interrumpidas cuando el cuerpo de Seungmin se abraza al suyo con fuerza.