|| Siɾνieƞtɑ... || Guardian Tales

[ Prólogo ]

[ . . . ]

Siempre he sido una persona ignorante

Nunca se fijarían en mí por la simple razón de ser una persona imperceptible, de pasar a sus costados, siendo excluida por la muchedumbre

Alguien inútil desde vuestro punto de vista, alguien sin importancia- alguien sin relevancia. Estando en una posición adicional dentro de un cuento de hadas

Contando últimamente los últimos días del año. Perdiendo me completamente en mi mente de por cuánto tiempo servi a este reino, camuflada como alguien inservible. Cómo una sirvienta incompetente...

— ¡Marie...! — alce la cabeza al haber escuchado mi nombre, levantándome del lugar en donde descansaba, dirigiendome apenada hacia la criada — Que haces perdiendo el tiempo. Ve a limpiar todo el pasadizo lo antes posible que muy pronto tendremos de regresó a nuestra reina — musitó encantada, recordando finalmente la fecha en donde situamos — ¡No le vayas a decepcionar!

( La reina de Kanterbury, Camila... )

— Si. Lo haré... — conteste, viéndola irse resignada a su zona de trabajo, soltando un breve suspiro de visualizar el sitio donde me paraba — Bueno' ha ponerse a trabajar

No fue para nada tedioso limpiar cada escombro polvoriento que había en este alargado lugar, ya que fue un trabajo sumamente sencillo para una persona como yo. Un trabajo que puedo hacerlo comúnmente

Y al pasar los minutos, finalice dicho requisito a tiempo. Descansando en una columna cercana mirando las afueras del palacio. Un hermoso jardín cuidado por los mismísimos jardineros del reino, quienes les juraron lealtad a la reina por haberlos recogido en las profundidades del reino. Dónde nadie (pocos) saben quiénes habitan ahí

Quienes viven gente de pocos recursos, llegando al extremo de arruinarse así mismos o desvivirse antes de que sea demasiado tarde. En ser la primera la más acertada, pero- también hay personas humildes viviendo ahí con sus hijos

Siendo lo último resaltante en mi caso

Hace tres años fui elegida por la mismísima reina de vivir a su palacio de forma gratuita, ocultada por una capucha que le tapaba medio rostro, dandome la idea de que ha venido aquí de forma incógnita. A cambio quiere que le sirva por toda mi vejez, hasta que fallezca a su lado

Claramente me negué. Porque le había prometido a mi madre con quién convivía que me quedaría a su lado hasta que vejezca- pero... Al voltear la cabeza con la intensión de buscar su ayuda, ví con claridad como mi progenitora le daban una suma cantidad de monedas del reino

Me ha vendido...

Y sin poder creerlo, me derrumbe en el suelo arenoso con las pupilas dilatadas. Estando sostenida por los caballeros de la reina quienes venían en acompañarla, tomándome con fuerza en llevarme a rastras del como seguía viendo a mi madre verle a lo lejos

¿No era lo suficientemente útil a su lado?

Nunca podré comprenderla, nunca podré preguntarle del porque lo ha hecho- de cuál ciega fui en haberla creído

Después de todo, solo era una niña sin entender aún las cosas, buscando una simple razón lógica del porque me habia traicionado