Capitulo 12

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-El duodécimo desplazamiento-

Obito dejó escapar un suspiro de frustración y se recostó en la silla de madera.

Había estado ayudando a Kakashi a diseccionar el sello de Shizuo, pero a diferencia de Kakashi, que era un maestro del fuuinjutsu, Obito solo podía ayudar con las partes básicas. Pero incluso este sello era demasiado complejo para que él lo manejara.

Luego miró a Kakashi, que yacía en el sofá, con la cara enterrada en un libro.

El Uchiha había estado buscando numerosos libros para que el hombre de cabello plateado los leyera como una forma de mantenerlo distraído, para no dejar que Kakashi se diera cuenta de lo que estaba planeando. Quería sorprender a su Omega, pero con Kakashi siendo tan inteligente, Obito tuvo que recurrir a comprar libros que mantendrían ocupado a Kakashi.

Sin embargo, estos recientes le dieron a Obito una idea del pensamiento de Kakashi. En tiempos anteriores, Kakashi le pedía que comprara libros sobre selvas, desiertos, cualquier cosa sobre topografía, libros de cocina, mapas, la mierda más aleatoria que uno pudiera pensar. Pero últimamente, todo se trataba de las Naciones Elementales. Más concretamente, la política, la geopolítica y la historia. A veces, Obito leía con él, pero otras veces no estaba de humor.

Pero ver a Kakashi leer, luciendo tan enfocado y concentrado hizo que su corazón se hinchara de orgullo. Lo trajo de vuelta a su conversación durante los primeros días de su llegada aquí. Kakashi hubiera sido un muy buen Hokage. Nunca ha conocido a nadie tan inteligente como él, pero al mismo tiempo apasionado por lo que hace.

"Sabes, parece que no puedo entender esta dimensión". Kakashi murmuró en voz alta, sacando a Obito de sus pensamientos. "En algunos casos, las cosas siguen siendo exactamente iguales o tan similares que las diferencias menores pueden pasarse por alto". Kakashi dijo mientras levantaba la vista del libro con el ceño fruncido. "Pero en otros casos, las diferencias son caóticas".

Obito preguntó: "¿Qué? ¿Que te hizo decir eso?" Se deslizó más cerca de su Compañero y leyó la página que Kakashi señalaba. Afirmó que si bien las Naciones Elementales no están en buenos términos entre sí, sus relaciones diplomáticas se mantuvieron civilizadas.

Como es el caso de Konoha y Suna.

Los países no eran aliados, pero gracias a los acuerdos comerciales, ninguno es hostil entre sí.

"Esta es una de las similitudes de las que estabas hablando". Obito dijo, asintiendo con comprensión.

"Sí."

Pero el Alfa siguió leyendo. "Otra similitud que quizás no sepas es que el Tsuchikage contrata mercenarios para hacer su trabajo sucio, para que sus ninjas no sean culpados".

Kakashi lo miró con los ojos muy abiertos. "¿Oonoki hizo eso?"

Obito se echó a reír. "Por supuesto, Akatsuki ha recibido tantas solicitudes, somos ricos con él".

"Interesante." Kakashi tarareó.

"Sí, pero ya que encuentras este mundo caótico, ¿qué tal si me ayudas con el sello de Shizuo? Estoy atascado."

Kakashi le frunció el ceño. "¿Cómo estás atascado? Son solo las partes básicas que se supone que debes—" Se detuvo cuando Obito empujó su trabajo en su rostro.

"Esta mierda no es básica". El Uchiha dijo: "Nunca antes me había encontrado con algo así, es casi una mezcla entre un sello jinchuuriki normal y alguna otra mierda".

Los ojos de Kakashi se entrecerraron mientras examinaba el sello frente a él. "Estás bien. Esta parte aquí se parece a lo que vi para el sello de Kushina-san, pero las bandas exteriores parecen un... ¿contrato?

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