La Obsesión De Cinco Hargreeves

09 - Nuevo intento de escape.

- Ya te dije la verdad. Ahora vamos a dormir. - Dijo serio -

- ¿Como puedes dormir con todo lo que les hiciste a todas esas personas? - Respondí muy molesta -

- Ya por favor, métete a la cama y duérmete. - volteó a verme y se notaba que su paciencia se estaba acabando -

- No. - Respondí segura -

- ¿No? ¡No me hagas obligarte! - Dijo ya molestó -

- Ya basta, hasta Ben era más hombre que tú. - Cinco me tomo de los hombros y me empujó a la cama -

- ¡Deberías callarte ya, hazme caso maldita sea estas acabando con la poca paciencia que te tengo!

- Debería matarte por lo que le hiciste a Ben - Dije con lágrimas en mis ojos y el soltó una risa burlesca -

- No tienes los ovarios para hacerlo cariño. - Dijo. -

- Créeme que los tengo pero hay una gran diferencia yo no soy como tú. - El se quedó callado unos segundos y después se acercó a mi para darme un gran golpe -

(...)

- - Desperté amarrada a una silla, pero pude notar algo ya no estaba en la academia - ¡ay no, no, no otra vez! - Susurre y entró cinco -

- Vaya despertaste. - Dijo sin hacer algún gesto -

- Dices amarme y me golpeaste ¿que tipo de amor es ese? - Dije molesta -

- No me dejaste otra opción y claro que te amo - Dijo mirando por la ventana - pero será mejor que te quedes aquí para que reflexiones.

- ¿Reflexionar? - Comencé a reír -. Se que te duele pero ya superalo. Superame. - El volteó su mirada a mi y claro que no se veía muy contento -

- ¿Me duele? ¿que exactamente? - Preguntó -

- Que no te amo.

- Bueno eso realmente me importa una mierda, igual eres mía y estaremos juntos por siempre me quieras o no. - Dijo con una estúpida sonrisa victoriosa -

- Sabías que puedo entrar en tu mente y enloquecerte aún más o aún mejor borrar algunos recuerdos por ejemplo cuando nos conocimos - Comente -

- No me importa, hazlo. - Se acercó a mi y me tomo del mentón para pegar sus labios con los míos -
Me gustan tus labios - Sonrió -

- Y a mi me das asco.

- Tu cabeza sigue sangrando, iré por algo para curarte.

- ¡Vete a la mierda idiota! - Grite frustrada por no poder hacer nada para desamarrarme -

- Relájate.

- ¿Relajate? - Comencé a llorar - ¿Dónde estámos?..

- Lejos de todos.

- ¿Puedes desatarme? Por favor..

- No. ¿quien me garantiza que no vas a intentar matarme? - Preguntó serio -

- ¿Yo matarte? No soy una asesina cinco. - Respondí -

- Quiero que me beses muy lento y que me digas que me amas mientras me besas. Sólo así voy  hacerlo te soltare y si me gusta volveremos a la academia.

- - Suspire cansada de esta situación y asenti -
De acuerdo, lo haré. - El se acercó a mi con una gran sonrisa y me desató, me levanté de silla y me acerqué a él quien ya se había recargado en la pared - ¿tengo que hacerlo ya?

- Sí quieres mañana. - Respondió -

- De acuerdo.

- Era ironía, obviamente tienes que hacerlo ahora. - Respondió -

- - Volví a suspirar y me acerqué a él - Voy arrepentirme de esto probablemente pero ya que no me dejas otra opción lo haré. - cinco sonrió y me jalo hacia él con sus manos en mi cintura cuando estabamos cerca me quedé pensando unos cuantos segundos y después golpee a cinco muy fuerte en medio de las piernas el gritó de dolor y yo salí corriendo que por suerte estaba abierta la puerta de la habitación vi la puerta para salir de la casa pero estaba sellada con tablas y escuché los pasos de cinco, comencé a buscar algo para defenderme y tome un cuchillo que estaba en el lavado apunte hacia la puerta de la habitación y el salió por esa misma -

- Tendrás muchos castigos amor - Dijo con una enorme sonrisa, estaba tan asustada cinco parecía loco y se veía muy enojado -

- Yo no quería hacerlo cinco, pero no me dejaste otra opción - mencioné y el comenzó a reír -

- ¡SÓLO ERA UN MALDITO BESO ______!  - Grito y comenzó a caminar hacia mí. Le apunte con el cuchillo -

- No me obligues a usarlo cinco - Las lágrimas comenzaron a salir una vez más -

- ¿Crees que te tengo miedo? - Soltó una risa -
¿porque nunca me amaste lo suficiente? - Preguntó. -

- Claro que lo hice, te ama tanto pero verte asesinando a esas chicas me hizo sentir asco por ti...

- ¿Sí? ¿Recuerdas como las maté?

- Lo recuerdo como si hubiera sido ayer.. - Respondí nerviosa -

- Bien porque probablemente morirás de la misma manera si no bajas ése cuchillo ahora mismo...
Te amo ¿porque no puedes entenderlo? - Dijo a unos pasos de mi -

- No me amas - Comencé a llorar - Cinco necesitas ir a un psicólogo, estas obsesionado y esa obsesión no te hace bien..

- ¿Psicólogo? No. ¿sabes que necesitó?
Te necesitó a ti, necesito que vuelvas amarme como cuando teníamos catorce. Eso necesitó pero te rehúsas a darmelo y si no quieres darmelo tendré que obligarte hacerlo..

- Me hiciste daño.. ¿Eso es amarme? - Dije llorando pero el avento un vaso a la pared -

- ¡TU ME OBLIGASTE HACERLO! - Grito y avento todos los platos al piso y todos se quebraron -

- Cinco calmate, mira haremos esto - Cinco se estaba quedando sin paciencia y eso me asustaba aún más porque cuando se queda sin paciencia es capaz de todo, hasta de golpearme o matarme -.. Dejaré el cuchillo y voy a besarte pero tendrás que prometeme que volveremos a la academia - Dije mirándolo -

- No. Tu no pones la reglas amor. Vas a dejar el cuchillo y vendrás a besarme después veré que hago. - Dijo ya un poco más calmado -

- B..bien. Pero no me vas atar de nuevo ¿cierto? - Dije sollozando -

- Lo prometo, siempre y cuando te portes bien conmigo.

- Bien.. - Cinco se recargo en la mesa esperando a que dejará el cuchillo y así fue, deje el cuchillo y me acerqué lentamente a el y lo bese, después recargue mi cabeza en su pecho y el me abrazo -

- ¿Vez? podemos estar bien pero te gusta hacerme enloquecer y eso no está bien. Tampoco está bien que me golpees. Te amo y nada nos va separar.

- - Preferí ya no decir nada, no quería que el reaccionara mal a cualquier cosa que pudiera decir -

- Dime que me amas. - Susurro con los ojos cerrados me quedé callada y volvió a decir pero más fuerte - Dime que me amas.

- ...Te amo - Dije asustada y sonrió aún con los ojos cerrados -

- No sabes cuanto deseé esto.