Mamá -susurro un pequeño niño de unos 5 años
por aquel frío y obscuro pasillo se escuchaban sollozos de una voz femenina un poco débil, el infante, vestido con aquella bata larga para dormir, recorrió el pasillo a pasos lentos, sus pies descalzos se helaban por el tacto del piso fino y frío con las suaves plantas de sus pequeños pies, con cada paso dado por el menor los sollozos aumentaban ligeramente dando paso a una discusión, ambas voces se recontradecian y se alzaban con cada palabra, ambas eran muy familiares para el menor, la voz femenina era la de su madre. . . . y la otra . . . no era de nadie más que su abuelo? . . . . . . su abuelo, hace cuanto que no lo ve?, desde su segundo cumpleaños de vida, que no sabe nada de el y ahora que su madre está a un mes de dar a luz a su hermana, aquel viejo soberano los manda a traer a su Palacio? pero que es lo que sucede??, para la pequeña cabecita del menor era difícil saber la razón del porque de las cosas que pasaban, y ¿quien lo podía culpar?, sólo era un infante
p-padre p-por favor, te lo suplico - dijo la mujer entre llantos- a mi niña no, por favor
el pequeño varón asomo ligeramente su mirar por aquella apertura que daba la puerta entreabierta, miró con cierta preocupación a su progenitora arrodillada ante aquel hombre de mayor edad, las lágrimas de su madre recorrían sin control su mejillas empapando todo su rostro, mientras aquel hombre de fuertes facciones miraba a su hija de manera desaprobatoria
Ya basta!!! - grito aquel rey- no quiero oirte más Catalina, mi desición esta tomada
p-pero padre -replicó la joven-
nada de peros!! -volvió a mencionar cansado de las insistentes súplicas- te he dicho que mi decisión está tomada, y no quiero escuchar más peros -repitió
p-padre entiendo que tu has tomado tu decisión, pero entiende que es mi hija -menciono entre llantos- y nisiquiera ha nacido -le recordó-
y crees que me importa - hablo fuerte y firme- vosotros me habéis traicionado, te he dado todo lo que tienes, te eduque y cuide desde que tu madre falleció y así me lo agradeces, esposandote con un hombre que ni siquiera es heredero al trono de su reino
y eso que yo lo amo!! -grito la joven-
tu insolente!! -refunfullo su padre
el infante detrás de la puerta grande de roble no comprendía que pasaba, porque estaban discutiendo y más importante que tenía que ver su futura hermana en todo esto?, su madre tenía razón, ella todavía no nacía, porque se peleaban por ella si todavía no estaba ahí con ellos?
¿Príncipe? - se escuchó en medio del silencio con duda
el infante se tenso al escuchar tales palabras a sus espaldas volteó con ligero miedo y duda sólo para encontrarse con una sombra de gran altura, forzando su vista diviso a un caballero de armadura plateada y pesada, parado a centímetros de el
¿que hace despierto a estas altas horas de la noche? -volvió a cuestionar el contrario
el mayor espero paciente la respuesta de su pequeño superior, pues se miraba un poco asustado por su aparición repentina,
por el contrario la mente del menor se encontraba en hake pues no sabía que contestar a aquel hombre frente a él, era nadie más ni nadie menos que el caballero principal, era el general de la armada real, la mano derecha de su abuelo y por lo tanto el mejor caballero de todo el Reino, seguro que si llega a mencionar algo incorrecto, descubrirá que estaba espiando la discusión de sus mayoresy-yo.... amm ..... no podía dormir?. . . sí no podía dormir así que busque a mi mami pero no la encuentro - hablo tembloroso porque no se le daba eso de mentir
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Me enamoré de la princesa (Silver x tu) Reescribiendo
FanficSilver un joven muy talentoso deside trabajar en el Palacio como caballero ....pero no se imagino que sería el caballero principal de la princesa por lo decide protegerla pero no se imaginó q se enamora de ella Correcciones entre otras cosas además...